En el Real Santuario de Aras se celebraba la solemne eucaristía presidida por el vicario episcopal de la Campiña, David Aguilera Malagón, quien destacó la importancia de la unión entre las dos ciudades que comparten devoción y vivencias.
En el texto, se expone que "en un país donde existe la libertad de expresión no se debe acosar a nadie por manifestar su apoyo a una doctrina que es seguida por millones de fieles en el mundo y en esta nación"