La otra alternativa sería sustituir en su totalidad o en parte la canalización actual de 22 kilómetros de longitud, construida a mediados del siglo pasado. Según José Cantizani, ahora se pierde un 40% del caudal, que se obtenerse podría hacer que Lucena fuera autosuficiente y no precisara comprar agua al Consorcio.
Además, la asociación está explorando la posibilidad de trasladarse provisionalmente a Palenciana, donde el ayuntamiento dispone de un edificio para este uso, actualmente sin actividad.
Vicente Dalda ha expuesto esta mañana el informe que demuestra que la Residencia Nueva Aurora no es apta para el alojamiento de personas, indicando que, personalmente, lleva un año y medio denunciando esta situación.
La iniciativa se enmarca en el programa de embellecimiento de los accesos a la ciudad y ha contado con la colaboración de empresas del sector del metal.