Agentes de la policía local y empleados de servicio de recogida de basuras de Epremasa se han implicado esta mañana en el agónico rescate de una camada de perritos que habían sido arrojados en una bolsa de plástico en el interior de un contenedor soterrado de basura orgánica en la calle Joan Margarit.
La fortuna quisó que una voluntaria de la protectora de animales Apama se dirigiera a uno de esos contenedores y oyese el llanto de los animales. Rápidamente se dió aviso a la Policía Local, que acudió al lugar de los hechos y, ante la imposibilidad de acceder al interior del contenedor con medios propios, dio aviso al personal de Epremasa.
Cuando finalmente se pudo acceder a la bolsa en la que se encontraban los cachorros, entre la expectación de las personas que esperaban junto al contenedor, pudo constatarse que en su interior había tres hembras de unas dos semanas de vida, todavía lactantes y con los ojos cerrados. Sin embargo, pese a los esfuerzos por reanimarlas de los agentes y los miembros de APAMA, ya era tarde para dos de ellas, que habían muerto asfixiadas. Una tercera sí pudo ser recuperada, despertando sus primeros gimoteos el aplauso de la gente. La perrita ha sido derivada a una clínica veterinaria, donde permanece en observación, según ha explicado a LucenaHoy, Araceli Cuenca, responsable de Apama.
"Esta muy débil, pero si logra sobrevivir las próximas horas, su destino será el hogar de una voluntaria de Apama que tiene una perra que acaba de parir una camada y puede actuar como madre y amamantar a la pequeña cachorrita, lo que mejoraría ostensiblemente sus posibilidades de salir adelante" ha explicado a este periódico Cuenca.
Desde la asociación se pone el acento sobre la "maldad de la persona que ha hecho esto", ya que existen "múltiples fórmulas para entregar los animales, incluida la de dejarlos en una caja fuera del contenedor, preservando su vida, en lugar de abocarlos a una muerte con sufrimient, por asfixia, como ha pretendido, y conseguido en dos casos, quien ha tirado esa bolsa al contenedor". Por eso la protectora invita a cualquier persona que pueda tener información sobre el autor o autora de estos hechos a ponerlo en conocimiento de la polícia y pedirá que se observen posibles cámaras de vídeo existentes en la zona.
