Hace unos días el mundo se sorprendía ante la 'colonización' de una cámara en altura del torneo de tenis de Indian Wells por un enjambre de abejas, obligando a suspender el partido que disputaban Alcaraz y Zverev durante unas horas, hasta la retirada del mismo, con absolutad tranquilidad, por un apicultor.
La primavera, con la floración del campo y el incremento de la concentración de pólenes en el ambiente, es la época más propicia para que las abejas decidan moverse en masa para buscar nuevos acomodos. Estos movimientos de miles de abejas, siguiendo a una reina, forman parte del ciclo vital de estos insectos, absolutamente necesarios y protegidos, y deben ser respetados.
No hay que ir muy lejos para encontrar situaciones similares. Esta misma mañana, efectivos del Parque Comarcal de Bomberos de Lucena acudían a una vivienda en la última planta de uno de los edificios de El Zarpazo. Los vecinos habían visto como el exterior de una de las ventanas se cubría progresivamente de abejas. Tanto por la altura, como por la necesidad de contar con personal experto, en estos casos se hace imprescindible la presencia de los bomberos o de un apicultor para retirar el enjambre, siguiendo un protocolo que persigue en todo momento causar el menor daño posible a los insectos.
Con ayuda de una escala y provisto de un traje especial, uno de los bomberos, con amplio conocimiento en el manejo de estas situaciones, procedía a aplicar humo e instalar un panal, intentando que la reina entre en el mismo y con ella el resto del enjambre, para poder trasladar posteriormente la colonia a una zona segura. Sin embargo, muchas veces esto no resulta fácil. A veces las abejas llevan ya mucho tiempo viviendo en las cámaras de aire de las viviendas, sin dejarse notar hasta la llegada de la primavera. Para entonces ya han formado una colmena y la solución se complica por lo inaccesible de la misma.
Esta misma tarde, los bomberos volvían al Zarpazo para ver si la actuación de esta mañana había dado resultado, encontrando el cajón-panal vacío, por lo que será necesario pasar a un plan "b" ante la previsible existencia de una colmena en el edificio. En estos casos se recomienda armarse de paciencia e intentar interactuar lo menos posible con estos insectos, los más importantes del mundo por su papel como agentes polinizadores, que también pueden resultar más agresivos si se sienten amenazados.
Las abejas están consideradas ganado semoviente productivo, por lo que están legalmente protegidas y bajo ningún concepto se debe proceder a su exterminio de forma indiscriminada.
