Efectivos de la Policía Nacional investigan la aparición de un cadáver en avanzado estado de descomposición en la zona del río Lucena, a escasos 300 metros del camino de El Cascajar y las instalaciones de Bilore.
Según han confirmado a este periódico fuentes municipales, el hallazgo se ha producido esta misma tarde en una zona de densa vegetación y difícil acceso, situada a espaldas de la Cooperativa Olivarera de Lucena, lo que ha obligado a solicitar la presencia de los bomberos del Parque Comarcal de Lucena, que han logrado llegar al punto en el que se encuentra el cuerpo desde las instalaciones de la propia empresa aceitera.
Las mismas fuentes señalaron que ha sido un vecino que buscaba setas en la zona quien ha encontrado el cuerpo, dando comunicación de los hechos a la Policía Nacional. Hasta el lugar se ha desplazado el forense, efectivos de la Policía Judicial y Unidad de Homicidios de Córdoba, así como varias patrullas de la Policía Local, que se han ocupado de cerrar el perímetro de la zona en la que ha sido encontrado el cuerpo. También ha entrado un furgón funerario de la empresa Tanatorios de Córdoba (TdCO) que presumiblemente trasladará los restos mortales al Instituto Anatómico Forense una vez que se decrete el levantamiento del cadáver, para determinar la identidad de la persona fallecida y las causas de su muerte. No obstante, debido a la falta de luz y las difíciles condiciones de extracción del cuerpo, se está barajando la posibilidad de suspender la búsqueda hasta primeras horas de la mañana y mantener custodiado durante toda la noche el lugar.
Por el momento no se conoce la identidad de la persona fallecida ni las circunstancias que han rodeado su fallecimiento. No obstante, se trabaja con la hipótesis de que pueda tratarse de Pedro Mayorgas, el hombre de 83 años de edad desaparecido el 29 de febrero en Lucena, y de cuyo paradero no se tiene información desde entonces. Se da la circunstancia de que esta zona fue batida de forma insistente y minuciosa por efectivos policiales y bomberos en distintas ocasiones con motivo de su desaparición. El último de estos dispositivos se desarrolló a finales de mayo, tras triangularse en el entorno del parque de El Cascajar y Puente Vadillo una de las últimas señales de su teléfono móvil. En el mismo participaron varias unidades de la Policía Nacional, Policía Local, Bomberos y técnicos del Grupo de Emergencias de Andalucía, concluyendo la búsqueda sin resultado alguno.