Quién diría que hoy, 2 de mayo, ha sido el Día Internacional Contra el Acoso Escolar. Reflexiono, con mi experiencia sobre el terreno recorriendo diferentes centros educativos y habiendo hablado con padres, tanto en persona, como con los que me han escrito preocupados vía email, y la idea principal que extraigo es que hay una falta total de preocupación sobre este tema por parte de la mayoría de los ayuntamientos y la Junta.
Los centros están descoordinados y perdidos, y muchas veces por el tema de las competencias no saben dónde acudir, ya que los ayuntamientos eluden responsabilidades lanzando los casos a la Junta y viceversa. La mayoría no han recibido formación (algunos incluso desconocen la existencia) en cuanto a protocolos de actuación ante un caso de acoso escolar o ciberacoso. Son necesarias actuaciones directas para educar a padres y alumnos en el comportamiento tanto en caso de acoso, como de ciberacoso. Esto no puede seguir siendo algo que se resuelva con la expulsión de dos o tres días del agresor y "tiramos porque nos toca" hasta la siguiente agresión. No deberían existir padres que vivan con el miedo permanente de que sus hijos vayan al centro educativo pudiendo ser agredidos. Esto no puede continuar quitándoles horas de sueño.
Por otra parte, me gustaría hacer ver que hoy, Día Internacional Contra el Acoso Escolar, no se ha llevado a cabo ninguna actividad de concienciación con respecto a este tema por parte del Ayuntamiento de Lucena. Este día ha pasado como uno más, en el que los padres que tienen un hij@ que sufre acoso o ciberacoso perderán horas de sueño pensando que su hij@ acudirá mañana a su centro educativo y podrá ser agredido, y en que algún niñ@ se acostará temeroso, levantándose sin ganas de ir a su colegio o instituto con miedo. Las actividades podrían haber ido desde conferencias, actividades, lectura de un manifiesto, convivencias… Cualquier cosa con el fin de educar y terminar con esta lacra que a día de hoy continúa en nuestros centros escolares.
Personalmente, me he puesto a disposición de quien lo necesite, he impartido charlas, he trasladado a especialistas las peticiones de padres que han contactado conmigo, he enviado los protocolos de actuación y les he aclarado dudas sobre estos a algunos centros; pero una persona, sólo una persona no puede derrotar al monstruo del acoso o ciberacoso. Entre todos sí, entre todos podremos con paciencia, educación y concienciación, erradicarlo de nuestros centros educativos, y que ningún niñ@ más vuelva a sufrir por él.
David Sánchez Jiménez
Presidente de Un cuento una sonrisaNº1 del programa nacional del instituto nacional de ciberseguridad(INCIBE).