Agentes de la Guardia Civil adscritos a los grupos especiales ROCA, en colaboración con una de las patrullas de la empresa que presta de forma privada el servicio de vigilancia del campo lucentino durante la actual campaña de recolección de la aceituna, detuvieron en la tarde del pasado viernes a dos hombres de nacionalidad rumana a los que sorprendieron en una finca de olivar en la que habían logrado hacerse con casi mil kilos de aceituna.
El dispositivo de seguridad se incautó del vehículo que utilizaban los presuntos autores de este intento de robo, repleto de fruto, como queda de manifiesto en estas imágenes, en las que también pueden observarse otra parte de la aceituna robada, en este caso ya dispuesta en sacos en el vehículo de vigilancia.
La aceituna recuperada fue depositada en la Cooperativa Olivarera 'Virgen de Araceli' para ser entregada a su legítimo propietario.