Estaba en el aire y varias personas habían denunciado ante la policía la existencia de cebos envenenados en distintas zonas ajardinadas de la zona oeste de la ciudad. Era una sospecha ya adelantada por LucenaHoy hace unos meses, a la que ayer dio visos de realidad la actuación de la Policía Local de Lucena tras identificar y detener a la presunta autora del abandono de alimentos envenenados o mezclados con cristales y alfileres en la vía pública para que los mismos fuesen consumidos por mascotas como perros o gatos, actuación que puede ser tipificada como delito contra la salud pública y con una multa de hasta 30.000 euros, según algunas fuentes.
Han sido necesarios varios meses de seguimiento y la colaboración ciudadana para esclarecer un asunto que se inició hace unos meses tras recibir diversas denuncias por parte de vecinos de la Plaza Prudencio Uzar acerca del depósito de alimentos envenenados en los jardines de esta plaza pública, lo que había provocado la muerte de algún perro, con el agravante de tratarse de una plaza frecuentada por numerosos menores al estar dotada de parque infantil. En todas las denuncias, la descripción de la persona implicada fue la misma.
En la mañana del miércoles, una nueva llamada telefónica por parte de una vecina, puso en aviso a la Policía Local, que comprobó que se había depositado en el lugar una bolsa con numerosos trozos de embutido. La misma denunciante apuntó posteriormente que la persona que la había colocado se encontraba en el interior de un supermercado, donde estaba adquiriendo una gran cantidad de este tipo de alimento.
Miembros de la Policía Local procedieron, ya en el exterior del establecimiento, a identificar a J.P.T. como presunta autora de los hechos, instruyéndose las correspondientes diligencias judiciales.
