.
El comedor social 'Virgen de Araceli' ofreció este viernes su primer almuerzo. Desde esta mañana, un grupo, de los más de doscientos voluntarios que atienden este recinto destinado a la solidaridad, trabajó para recibir a los usuarios a partir de las 14:00 horas. Los días elegidos para abrir estas antiguas dependencias de la residencia Virgen del Valle son los viernes, sábados y domingos, aunque, en el caso de que fuera necesario, se ampliaría la oferta a más jornadas de la semana.
El servicio alimenticio es gestionado por una empresa de catering que diariamente cocina los menús seleccionados. Los voluntarios, pertenecientes a cofradías lucentinas, miembros de Cáritas y ciudadanos diversos, realizaron hace unos días un curso de manipulador de alimentos en el colegio 'La Purísima' para poder servir las comidas.
La organización es dirigida y ejecutada por las cinco Cáritas de Lucena. A las ya existentes en las parroquias de Santiago, El Carmen, Santo Domingo y San Mateo, se ha unido recientemente la de la parroquia de la Sagrada Familia. El párroco de la misma, José Feliz García es el director de esta ramificación de la acción caritativa y social de la Iglesia Católica, instituida recientemente en la parroquia del barrio del Valle.
Los beneficiarios de esta iniciativa, que ha sido apoyada por el Obispado de Córdoba, han de apuntarse previamente en alguna de las sedes de las cinco Cáritas anteriormente señaladas. La directora del comedor social 'Virgen de Araceli' es Teresa Pérez García, representante de Cáritas de la parroquia de Santiago. En este primer día de actividad, la organización y la disposición de los voluntarios, perfectamente ataviados con batas blancas y guantes, fue sobresaliente. Las donaciones económicas son imprescindibles para la continuidad de este proyecto.
.