Todos los ciudadanos de Lucena cuando paseamos por nuestras zonas rurales y de campo: Campo Aras, Las Vegas, Carretera de Rute, Vía Verde, Los Poleares, Polígonos Industriales, podemos ver numerosos caballos, ponis, y burros atados en solares y terrenos vacíos, al borde de las carreteras y caminos. Los propietarios de la mayoría de estos animales, los tienen a la intemperie las 24 horas del día los 365 días del año. Estos animales no disponen de sombras, de techo, de agua, ni de alimentación adecuada, sólo los van cambiando de sitio para que coman hierba.
El hecho de tener un animal de estas características obliga a una serie de requisitos para el bienestar del animal y para la seguridad de los ciudadanos. Las diferentes leyes que regulan la protección de animales, las explotaciones equinas, y la propia ordenanza municipal de este Ayuntamiento nos obliga a los ciudadanos a denunciar a las autoridades competentes estos hechos.
Posiblemente exista desconocimiento, pero es nuestra obligación denunciar, tanto por proteger a estos animales indefensos, como por evitar graves riesgos y accidentes que se puedan ocasionar.
La Ley 11/2003, de 24 de noviembre, de Protección de los Animales, el Real Decreto 804/2011, de 10 de junio, que regula las Explotaciones Equinas, y la Ordenanza Municipal de Protección y Control de Animales de diciembre de 2001. Obliga al que posea este tipo de animales a proporcionarle un alojamiento adecuado, facilitarle la alimentación necesaria para su normal desarrollo, cuidar y proteger al animal de las agresiones, situaciones de peligro, incomodidades y molestias que otras personas o animales les puedan ocasionar, así como evitar las agresiones del animal a las personas o a otros animales. Y destaca como prohibiciones mantenerlos en lugares e instalaciones indebidas desde el punto de vista higiénico sanitario así como mantenerlos permanentemente atados y en recintos y lugares donde no puedan ser debidamente controlados y vigilados. También se establece las condiciones de ubicación y de las instalaciones de estos animales debiendo disponer de protección contra las inclemencias del tiempo, y tener acceso a comida y agua. Nuestra Ordenanza Municipal establece que queda prohibido situarlos a la intemperie, sin la adecuada protección respecto a las condiciones climatológicas. Y dice que los agentes de la autoridad y cuantas personas presencien actos contrarios a esta ordenanza tienen deber de denunciar a los infractores. Los animales cuyos dueños sean denunciados por causarles malos tratos o por tenerlos en lugares que no reúnan las condiciones impuestas por las normas sanitarias o de protección animal, podrán ser decomisados si sus propietarios o personas de quienes dependan no adoptasen las medidas oportunas para impedir dicha situación.
Con sólo dar una vuelta por el entorno natural de nuestra ciudad, vemos la gran cantidad de propietarios de animales que están cometiendo estas infracciones graves a la vista de todos y que hace que los que amamos y respetamos a los animales, más que un paseo de placer por el campo, nos indigne y nos alarme esta grave situación a los ojos de todos sin que nadie hagamos nada.
Ahora empieza el verano, imaginemos la situación de estos equinos, a pleno sol, sin cobijo y sin agua. Los propietarios tienen la obligación de tenerlos en las condiciones que establece la ley.
Además no podemos olvidar el grave peligro que supone que estos animales estén en el campo, sin vallas, sujetos con una cuerda. En más de una ocasión se han soltado, provocando accidentes graves, o cualquiera puede soltarlos o cortarles la cuerda o algún desaprensivo golpearlos o algún otro animal atacarlos.
Estos animales atados están indefensos, desprotegidos, a la intemperie, sin cobijo, soportando más de 45 grados al sol, sin agua y sin una alimentación adecuada.
Sirva este artículo como denuncia de esta grave situación y como invitación a todos los ciudadanos a no dejar pasar estos hechos, para acabar con esta situación lamentable y proporcionar a los equinos el derecho que tienen como cualquier otro animal a que las personas que los tienen bajo su posesión les proporcionen unas condiciones de protección y bienestar, reguladas en las ley.
Somos los ciudadanos, los obligados a denunciar y los ayuntamientos, a través de la Policía Local, los que en primera instancia tienen la potestad de hacer cumplir las leyes.
Para denunciar podemos hacerlo en la Policía Local, al Seprona o a la Asociación Cyd Santamaría. Tanto Seprona, como Asociación Cyd Santamaria existen correos electrónicos y formularios de denuncias, pero es fundamental la colaboración ciudadana y la actuación de nuestras autoridades municipales, para luchar por erradicar esta lamentable y vergonzosa situación de claro maltrato animal en nuestra ciudad.
seprona@guardiacivil.org Teléfono 062
info@asociacioncydsantamaria.es Teléfono 610397027
Carmen Cabeza López
