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"Confío en que pagarán los terrenos y seguimos trabajando para ello". Con estas palabras respondía el pasado martes el concejal de Urbanismo, Miguel Villa, a una pregunta del PP sobre la situación en la que se encuentra la ya histórica por antigua petición del ayuntamiento de Lucena a la Junta de Andalucía por la que se exige el pago de los suelos ocupados por la administración andaluza para la construcción del tramo Lucena-Cabra de la autovía A45.
Villa indicaba que esta semana está prevista una nueva reunión entre técnicos de la Delegación Provincial de Obras Públicas y la Gerencia de Urbanismo de Lucena "para cerrar los aspectos técnicos, legales y jurídicos del acuerdo", destacando la complejidad del mismo y justificando el retraso de este tema en "la intervención en el mismo de los servicios centrales de la Consejería".
Aunque Villa no quiso desvelar dato alguno sobre la forma en la que se resolverá el asunto, la respuesta del edil responsable del Urbanismo local deja abierta la posibilidad de que exista desembolso económico de la Junta de Andalucía como contrapartida a la utilización de suelo municipal para esta infraestructura, aunque esa posibilidad había venido siendo desestimada hasta ahora por la administración autonómica, que vinculó el pago de los suelos a la realización de varias obras, algunas de ellas inherentes al proyecto de la propia autovía como la reforestación de los taludes otras correctoras de la propia actuación como las obras para la eliminación de escorrentías sobre el camino de Torremolinos y alguna de nuevo cuño, como la pasarela sobre el río Lucena para facilitar el acceso al estadio 'Ciudad de Lucena'.
Así pues, parece que la resolución de este asunto, uno de los caballos de batalla de IUCA y PP con el anterior gobierno municipal, entra en su recta final.
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