El nuevo cambio de ubicación del mercadillo municipal de los miércoles polarizó buena parte del debate político en la sesión plenaria celebrada este miércoles en el Ayuntamiento de Lucena.
La propuesta del equipo de gobierno de trasladar los puestos desde las calles centrales del nuevo recinto ferial hasta el aparcamiento del auditorio, motivado, principalmente, por la apertura del carril bici sobre una de las calles que se venían utilizando para la instalación de los puestos, generó un cruce de críticas entre el PSOE y el equipo de gobierno, al defender los socialistas que esta modificación de la ordenanza se produce sin un consenso previo con los vendedores y en contra del sentir general de la inmensa mayoría de los primeros.
Alberto Lora, concejal socialista, manifestó en el pleno de ayer que "un 80 por ciento" de los vendedores le habían trasladado su disconformidad por el cambio de emplazamiento durante la visita girada este miércoles al mercadillo para conocer su opinión. “Nos pedían simplemente estabilidad y volver a la ubicación actual tras las obras del carril bici, y también nos presentaron algunas propuestas, como que se abrieran los servicios que hay en el recinto ferial, que mejoraran la limpieza de la zona y que se cerrara al tráfico el carril bici los miércoles por la mañana al igual que se hace en la Ronda del Valle. Los comerciantes son los que trabajan allí todos los miércoles, es su forma de vida y nosotros vamos a defender lo que ellos nos pidan”, señaló Alberto Lora.
Según el grupo socialista, el plano de la nueva ubicación no contempla una separación entre los puestos, las medidas son inferiores a las que se han mantenido hasta ahora, apenas les cogen sus furgonetas detrás de los puestos y muchos de ellos se van a ver perjudicados, al quedar muy lejos de la entrada principal al recinto, por lo que incluso peligra su continuidad en el mercadillo.
En similares términos se expresaron Ciudadanos, IU y el concejal no adscrito, Francisco de Mora, que destacaron la falta de consenso con la que se llega a este cambio de ubicación.
El concejal de Mercados, Francisco Barbancho, reconoció que no se ha buscado el consenso del colectivo, señalando que "en colectivos tan numerosos puede haber distintas sensibilidades y unos vendedores opinan de una forma y otros de otra" y señaló que el cambio "pretende facilitar su trabajo" y está amparado por un informe de la Policía Local que señala "la inviabilidad de mantener la localización actual con el carril bici, concluyendo que el nuevo emplazamiento es más seguro", a lo que se suman otros aspectos como la limpieza.
El asunto fue aprobado con los votos de PP y Vox, el PSOE votó en contra y el resto de grupos se abstuvieron. La modificación de la ordenanza debe ser enviada ahora al Consejo Consultivo y pasar el trámite de exposición pública, durante el cual se podrán realizar alegaciones por parte de los interesados, tras cuya resolución quedará definitivamente aprobado sin que tenga que volver al pleno.