He oído la grabación del acto que se realizó días pasados en el Hotel Santo Domingo en el que intervinieron los segundos de las candidaturas a las municipales de 2015.
Y con todos mis respetos, tengo la sensación de que nuestros políticos se están convirtiendo en gestores, administrativos, directores de empresas o cargos similares, olvidando la grandeza y la humanidad de la política.
Es ahora que es cuando el Ayuntamiento sigue siendo el poder humano y personalizado más cercano al ciudadano, y que es cuando el ciudadano necesita más a ese poder cercano porque sus problemas son cubrir las necesidades primarias y elementales a las que tienen derecho constitucionalmente, porque su problema, el desempleo, el paro, afecta a la dignidad de la persona, cuando su Ayuntamiento le dice: "no tenemos competencias".
En un escrito, dirigido el pasado 30 de abril a la candidatura de mi partido, le decía:
"Como se están pidiendo propuestas, me gustaría que el PSOE en Lucena tuviera prioridades y que estás fueran: máximo presupuesto, esfuerzo y trabajo por las políticas sociales que abarcan a todos los sectores de Lucena: PARO, EMPLEO, DEPENDENCIA, AUTÓNOMOS, PYMES, EMPRESAS. (No nos vale lo de "no tenemos competencias". Si no las tenemos se ganan como habrá que ganar los derechos y libertades que la Derecha nos ha quitado)"
Con la Constitución de 1978 recuperamos dignidad, derechos y libertades de las que carecimos durante mucho tiempo. Y los ayuntamientos democráticos se hicieron próximos a los ciudadanos.
La Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen Local consiguió que muchos servicios que los ciudadanos necesitaban se los prestará su Ayuntamiento.
Y hubo, un momento, histórico, en que muchos Alcaldes, antes las necesidades y hambre de muchos vecinos, invirtieron el dinero de otras partidas para socorrer a las personas. Después fueron juzgados, y, en la inmensa mayoría de los casos, la justicia entendió la situación, porque la justicia no esta reñida con la benevolencia, al igual que el socialismo deja de ser socialismo sino tiene como meta transformar una sociedad para hacerla más justa y si además pierde su humanismo.
Y ahora, ¿qué nos pasa?, ¿es que la Ley 27/2013, de 27 de diciembre, de racionalización y sostenibilidad de la Administración Local., aprobada por la mayoría absoluta del PP, es eterna?
La resignación no es socialista.
Un socialista, si antes no ha dado todo su esfuerzo por cambiar lo que aleja a los Ayuntamientos de los vecinos, no puede decirle a ningún habitante de su municipio: "esto no te lo puedo arreglar yo, tendrás que ir a Córdoba, yo no tengo competencias"
Iñaki Azkuna, Alcalde de Bilbao y considerado como el mejor alcalde del mundo, dijo una frase muy parecida a la que hace unos días pronunciaba ante los medios nuestro candidato a la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo: "Cuando hay situaciones de necesidad, uno no puede decir que eso no es de su competencia. Si no es de mi competencia sí es de mi incumbencia. A mí me concierne y me importa y mi obligación es buscar soluciones"
Comparto totalmente lo dicho por Ángel.
Le pido a la candidatura de mi partido que lo haga suya. Los problemas de las personas sí son de la incumbencia del PSOE.
Antonio Sánchez Villatoro
Secretario Organización
Agrupación PSOE. LUCENA
Secretario Organización
Agrupación PSOE. LUCENA