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En la mañana de ayer se celebró en el ayuntamiento de Lucena una nueva reunión entre el alcalde en funciones, Miguel Villa y el concejal de Personal, José Cantizani, y representantes de los distintos sindicatos que representan a los funcionarios de la policía local. Sobre la mesa el controvertido asunto de la importante pérdida de retribuciones que la aplicación de las medidas de ampliación de la jornada laboral a 37,5 horas decretadas por el ejecutivo central supondrá a este colectivo, que verá reducidos sus salarios en una cantidad que oscila entre los 300 y los 400 euros al mes.
Según ha explicado Miguel Villa a LucenaHoy, la reunión celebrada ayer sirvió para volver a poner de manifiesto la dura pérdida de poder adquisitivo que que la aplicación del Real Decreto supone para estos empleados municipales, pero también "las dificultades que el equipo de gobierno tendrá para conseguir paliar esa disminución de ingresos".
El regidor en funciones indicó que "no será fácil encontrar una solución, aunque los contactos se están desarrollando en un clima constructivo y con una clara voluntad de estudiar alternativas".
Villa aseguró que el equipo de gobierno "no comparte ese ataque general que el Real Decreto supone para los trabajadores públicos en general y para la policía local en particular" y anunció que "estamos estudiando todas las propuestas que han planteado los sindicatos".
Por su parte, los agentes de la policía local volverán a reunirse la próxima semana en asamblea.
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