Suvilusa ya conoce las pretensiones del fondo de inversión DSSV con respecto a la hipoteca de la promoción de viviendas de protección oficial construida en El Zarpazo. Una delegada de esta empresa se desplazó ayer hasta Lucena para exponer a los consejeros de la empresa municipal la situación y los diferentes escenarios que se plantean en este momento y que pasan preferentemente por dos alternativas: la posibilidad de que Suvilusa recompre la deuda de 1,2 millones de euros con una "quita" que DSSV sitúa inicialmente en unos 200.000 euros o que sea el propio fondo de inversión quien ponga en marcha la comercialización de los inmuebles, que en estos momentos pagan un alquiler social, en muchos casos bonificado, y con opción a compra.
Además, distintas fuentes han indicado que este fondo de inversión habría puesto una fecha límite, en torno a tres meses, para que se materialice la primera de las opciones, aunque es consciente de las dificultades que entraña sacar adelante una operación financiera de estas características, que habría de venir avalada por el Ayuntamiento de Lucena y exigiría a Suvilusa obtener una nueva financiación para obtener el precio de venta que finalmente se pacte.
La responsable municipal de Suvilusa y concejal de Hacienda, Araceli Bergillos, ha asegurado hoy que la reunión se desarrolló en un ambiente muy cordial, con una buena predisposición a la negociación y la próxima semana se celebrará un nuevo encuentro para avanzar más en un acuerdo que considera posible "antes del mes de mayo" y por tanto del final del actual mandato corporativo.
Bergillos ha reconocido que cada una de estas opciones "tiene unos condicionantes" que no ha querido revelar por formar parte de la negociación abierta y reconoció que "la recompra de la hipoteca no depende cien por cien de Suvilusa, que tendría que hacer una ampliación de capital y salir a mercado a buscar la financiación, por lo que aunque se está trabajando en esta línea e incluso se han pedido ya a los servicios jurídicos algunos informes, tampoco se descarta la vía de la comercialización". No obstante, Bergillos ha señalado que "se he tanteado esta posibilidad con algunas entidades y si hay respaldo del ayuntamiento, podría ser viable".
El primer paso podría ser presentar una oferta la próxima semana. Y es que desde Suvilusa y el Ayuntamiento se entiende que la compra de estos activos inmobiliarios por parte de DSSV incluso podría resultar beneficiosa para la maltrecha economía de la empresa municipal, que podría obtener una reducción de hasta un tercio del capital que en su día solicitó a Caixa Bank para acometer esta inversión.