Un pequeño arreglito y listo. La inscripción en latín insertada en el arco que cincunda la parte posterior del Monumento al Santero, inaugurado el pasado domingo, contenía un error y nadie se había apercibido de ello.
Los promotores del monumento pretendían incluir la expresión: "La madera y la fe", pero para ello se debería haber escrito "Lignum et Fides". El latín es una lengua declinable, y la palabra "fidei" representa la forma de genitivo del sustantivo "Fides" –fe, confianza, lealtad...–.
Descubierta la errata había dos alternativas. La primera era cambiar "fidei" por "fides". Complicado sin sustituir el panel. La segunda –y a la postre la utilizada tras consultar a algún experto en latín– ha sido eliminar la conjunción "et", con lo que la expresión modifica su sentido pero puede encajar con lo que se pretendía: "Lignum fidei" –la madera de la fe– que puede aludir tanto al tronco de olivo de Jerusalem que se conserva en el interior del monumento, como, de forma simbólica, a la vinculación entre santería y fe a través del peso de la "madera", del trono, sobre el hombro del santero.
Lo dicho... masilla, lija, un poco de pintura y asunto arreglado sin incurrir en costes adicionales.