El pasado viernes se descubría la placa que a partir de ahora dedica al empresario Primitivo Picó la rotonda de la carretera de Cabra, junto al multicines ArteSiete. La iniciativa, auspiciada por el Partido Popular en la Comisión Municipal de Nominación de Calles, y refrendada por el pleno municipal, reunió a numerosos familiares y una representación de la corporación municipal.
La "Glorieta Primitivo Picó" rinde homenaje a este empresario, nacido en Jijona en 1917, y al que la Guerra Civil hizo recalar en Lucena con solo 19 años, ciudad en la que una vez finalizada la contienda decidió fundar su empresa, junto a otros tres socios, en 1943. Desde entonces el nombre de Primitivo Picó, fallecido en 1978, ha sido sinónimo de dulces, turrones y frutas confitadas. En la empresa, que llevó su nombre y el de Lucena por toda España y algunos países hispanoamericanos a los que se exportaban sus productos, llegaron a trabajar hasta 300 personas en plena temporada navideña durante la díficil época de los años 60 y 70.
En el marco de este sencillo acto, su hija, Mª Rosa Picó Soler, dio lectura a un texto, a modo de semblaza sobre el homenajeado, y mostró su agradecimiento al PP, por proponer la figura la Primitivo Picó para dar nombre a este espacio público, y a la corporación municipal por ratificar esta nominación, que supone todo un honor para el recuerdo de su padre y su familia, más aún, si cabe, por la cercanía entre esta rotonda y el lugar que ocupó la antigua fábrica, situada al final de la calle Mesón, para ir luego ocupando otros espacios contiguos a medida que fue creciendo.