Ayer abría sus puertas en la segunda planta de la Casa de los Mora la segunda exposición permanente que albergará este inmueble: "Artesanía velonera lucentina". La exposición, creada por la Asociación 'Amigos del Velón' siguiendo criterios museísticos, propone al visitante un recorrido por el proceso productivo de las velonerías, nombre que recibían los talleres broncísticos lucentinos: la fundición, el desbastado, el torneado, el bruñido, pulido o el cincelado, así como el recorrido de otras industrias centradas en el trabajo del metal, como la calderería basado en el trabajo del cobre o el latón y, más modernamente, la orfebrería. Se exponen para ello distintos bancos de trabajo y piezas históricas, perfectamente restauradas, junto a la reproducción de un horno, un crisol y los útiles usados por los artesanos que desde el último tercio del siglo XVIII se dedicaron a este noble arte de modelar el bronce y otros metales en forma de mil y un objetos para la decoración, iluminación o uso doméstico. Varias imágenes de antiguas velonerías complementan esta parte del museo. El resto viene dado por varias vitrinas en las que se muestran piezas de distintas épocas que permiten acercarse al trabajo de estos artesanos, elaborados en bronce, latón o cobre, como capuchinas, candeleros, almireces, braseros, chocolateras, calderos, alambiques o velones.
La inauguración de esta exposición permanente se abría con un acto institucional en el que Joaquín Pimentel, presidente de la Asociación Amigos del Velón, integrada por 23 descendientes de empresarios del sector, algunos de ellos aún en activo, mostró su agradecimiento a las distintas empresas y particulares que han hecho posible esta muestra cediendo su trabajo o sus piezas.
A continuación el cronista oficial de Lucena, Francisco López Salamanca, pronunciaba una conferencia sobre los orígenes históricos del trabajo del bronce en nuestra ciudad, su auge durante el siglo XIX, cuando se convirtió en la primera industria local, exportando sus productos a Francia, Portugal y Marruecos y su decandencia, ya durante la segunda mitad del siglo XX con la llegada de otros materiales y gustos estéticos. Reclamó López Salamanca más ayudas y apoyo real a las escasas trece industrias del sector que aún perviven, dentro de un sector que consideró "en fase de extinción".
Cerró el acto el alcalde de Lucena, Juan Pérez, agredeciendo a Amigos del Velón su trabajo desinteresado para rescatar del olvido y legar a generaciones futuras la esencia de este sector productivo, otrora fundamental para la economía lucentina, representado en este museo.