El concejal de Obras y Servicios Operativos, César del Espino, ha anunciado hoy que el cementerio municipal musulmán de Lucena entrará en funcionamiento en el año 2022. El edil lucentino ha explicado que el ayuntamiento ya dispone del proyecto de ejecución de la zona de inhumaciones, que incluirá en torno a 53 unidades de enterramiento en suelo que se irán ejecutando por fases, estando previsto que la primera de ellas, con un total 10 a 12 fosas y un presupuesto en torno a los 20.000 euros, pueda iniciarse en las próximas semanas mediante un contrato menor.
Según Del Espino, de forma paralela se está trabajando en la modificación de las ordenanzas municipales de Cementerios, en las que se incluirán las tasas relativas a los enterramientos que se efectuén en esta zona del Cementerio Municipal San Jorge destinada a las inhumaciones según el rito musulmán, ordenanzas que tendrán vigencia a partir de 2022.
El edil lucentino ha aclarado que este cementerio se integrará en el camposanto ya existente, del que no estará separado físicamente, funcionando como una parte más de este.
El ayuntamiento de Lucena ya recepcionó a finales de 2020 la primera fase de la construcción del Cementerio Municipal Musulmán 'Al-Yussna' por un importe total de 79.200 euros, que incluyeron la construcción de un edificio que hará las funciones de recepción, sala de depósito de cadáveres, sala de espera, aseos y almacén, parte del vallado perimetral de la parcela triangular de 1.642 metros cuadrados sobre los que se ubicará esta necrópolis consagrada al rito musulmán y la construcción de las puertas de acceso a la misma y una pequeña rampa exterior para la entrada de vehículos funerarios.
Este cementerio ha venido siendo demandado por la comunidad musulmana establecida desde hace muchos años en nuestra ciudad –donde cuenta también con una mezquita–. De hecho, la nominación de esta necrópolis, incluida en el recinto del Cementerio Municipal San Jorge, fue aprobada por el pleno municipal del Ayuntamiento de Lucena en julio de 2019 por unanimidad, atendiendo la solicitud presentada ante el consistorio por el presidente de la Comunidad Islámica de Lucena, Abdessalam El Hinda Amalal.
Según datos del padrón municipal en Lucena existe una población estable compuesta por casi dos mil habitantes procedentes de países que profesan la religión musulmana, que, en caso de fallecimiento tienen que optar en muchos casos por repatriar el cadáver a su país de origen para que pueda ser enterrado según sus ritos y costumbres. Actualmente solo existen dos parcelas funerarias consagradas al rito musulmán en la provincia de Córdoba, situadas en la capital –Cementerio de Ntra. Sra. de la Salud– y en la localidad de Almodóvar del Río –Cementerio Municipal de San Fernando–.
Las leyes españolas reconocen a los ciudadanos la libertad de culto y el derecho a recibir una sepultura digna, de acuerdo con los ritos de cada confesión, y hacen referencia al derecho de la comunidad islámica de España a recibir parcelas para realizar sus enterramientos, así como las medidas que les permitan observar sus ritos funerarios, que incluyen la ceremonia del lavado y purificación de los cadáveres según los preceptos islámicos, tras la cual los musulmanes envuelven a sus fallecidos en un sudario blanco y los introducen en un ataúd, que se sepulta en tierra, orientado a la Meca.