La concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Lucena, Charo Valverde, ha anunciado hoy la adjudicación de los trabajos para la redacción del Plan Especial de adecuación medioambiental del sur de Lucena, un proyecto que busca abordar la progresiva regularización de las edificaciones irregulares de Campo de Aras y Cristo Marroquí, que actualmente cuenta con más de quinientas construcciones fuera de ordenación.
Valverde ha recordado que desde la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana, se identificó la insuficiencia en las infraestructuras generales de abastecimiento de agua, saneamiento y servicios básicos en los planes parciales SR1, SR2 y SR3, indicando que la contratación de la redacción de este plan responde a la necesidad de disponer de herramientas que permitan "regularizar" las agrupaciones de edificaciones existentes y garantizar su seguridad y salubridad.
El proyecto, que quedó desierto en un primer intento, ha sido adjudicado a Narval Ingeniería, una consultora malagueña con amplia experiencia en ingeniería civil y urbanismo, por un importe de 260.725 euros. El equipo redactor estará compuesto por profesionales multidisciplinares, incluyendo ingenieros, arquitectos y técnicos en ciencias ambientales, quienes se encargarán de actualizar la cartografía básica y realizar un inventario de las edificaciones existentes.

36 MESES DE TRABAJO
Con una duración estimada de 36 meses, los trabajos que se van a realizar por este equipo serán, en primer lugar, la actualización de la cartografía básica del ámbito del plan parcial SR1 y SR2, y también de las edificaciones situadas en el contorno de su delimitación. Posteriormente, se realizará el inventario de las edificaciones existentes en estos dos planes parciales y la elaboración del avance de este plan especial y, finalmente, la elaboración del documento final.
Queda fuera del proyecto el plan parcial SR3, que sí ha desarrollado ya su propia planificación urbanística, al contar con menos preexistencias. En las próximas semanas, se llevará a cabo una reunión con los representantes de los vecinos para informarles sobre el desarrollo de los trabajos y los pasos a seguir. "Esperamos que esto sea en cuestión de un mes o un mes y medio", ha señalado hoy la edil de Urbanismo.
Una vez concluida la redacción y el inventario de edificaciones, se comunicará a los vecinos que deseen acceder a los servicios municipales la obligación de solicitar la Declaración de Asimilado Fuera de Ordenación (DAFO). "Cuando llegue la hora de realizar el proyecto de obra, quienes tengan esa declaración tendrán la posibilidad de llevar su acometida a las instalaciones que se hayan realizado o de obtener agua de la red municipal. Quienes no la tengan o no puedan conseguirla, no tendrán esa posibilidad", ha señalado Charo Valverde, que ha querido dejar claro que el papel del Ayuntamiento concluye con la redacción del plan y la puesta a disposición de los vecinos de la infraestructura general de abastecimiento y saneamiento en un punto concreto de la zona. Todas las obras de conexión de cada vivienda a esas infraestructuras deberán ser satisfechas por los propietarios de las viviendas.
Charo Valverde ha señalado que Lucena es la primera ciudad andaluza en poner en marcha la redacción de un plan de estas características e incluso son muchos los ayuntamientos que se han interesado por el procedimiento para trasladarlo a sus localidades. La edil popular se ha mostrado favorable a poder extender este modelo de actuación a otras zonas de segunda residencia fuera de ordenación como Poleares o Las Vegas, "si funciona bien", aunque señalaba que estas zonas "no tienen en la actualidad los problemas de salubridad que presenta Campo de Aras" ni la amenaza de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir de suspender el suministro.