La concejal delegada de Vivienda, Araceli Bergillos, ha salido hoy al paso de las declaraciones realizadas ayer por el PP sobre la situación de las viviendas de protección oficial de la calle Cordoba.
Bergillos acusaba a los populares hacer una política de "titular y foto" y les pedía que "cuando hablen lo hagan con datos, para no quedar en evidencia como ha ocurrido con sus últimas intervenciones".
La edil socialista ha querido dejar claro que la empresa municipal Suvilusa "no tiene delegada la gestión de esas viviendas". Según Bergillos, técnicos de AVRA visitaron los edificios detectando una serie de problemas que quedaron recogidos en un primer plan de actuación que incluía a un solo bloque, con una dotación económica de 25.000 euros que permitían una contratación rápida de los trabajos. Sin embargo, con posterioridad se decidió ampliar la actuación al resto de edificios, incrementando la cuantía económica del proyecto de obras a 84.918 euros y estableciéndose un plazo de ejecución de tres meses. El cambio en el proyeco ha supuesto que pase a ser un contrato mayor, que tiene unos plazos de licitación más amplios, aunque ya está en manos del área de contratación y AVRA ya solicitó "el día 5, antes de que el PP diese su rueda de prensa", la pertinente licencia de obras.
Bergillos señaló que "personalmente, me gustaría que las obras estuviesen terminadas y he insistido en cada conversación o mail para que se agilicen los trabajos o se ejecute una intervención de urgencia, si fuese necesario, como se hizo el pasado año".
Respecto a la limpieza de los patios interiores de los bloques Bergillos apuntó que desde los servicios jurídicos municipales se ha advertido reiteradamente de forma verbal que dicha actuación no es de competencia municipal, correspondiendo la misma a la comunidad de vecinos, como ocurre en otros casos similares. "Esos patios no tienen la consideración de calle, sino de espacios comunitarios", indicó la responsable municipal de Suvilusa, que manifestó que se ha pedido un informe por escrito sobre esta circunstancia que impide que los trabajadores municipales actuén en dichos patios interiores.