La empresa municipal Aguas de Lucena sacará a licitación en los próximos días la obtención de la financiación de 6,5 millones de euros necesaria para poder hacer frente a la primera de las dos fases en las que se ha dividido el proyecto de la nueva canalización de agua desde el acuífero del Nacimiento de Zambra hasta los depósitos municipales.
Según ha explicado la responsable de Aguas de Lucena, Mamen Beato, el proyecto, cuyo presupuesto se había cifrado inicialmente en siete millones de euros, se eleva ya a más de 12 millones como consecuencia del importante incremento de los precios de los materiales necesarios para su ejecución.
Beato ha indicado que el ayuntamiento, que avalará la operación de crédito para acometer las obras, sigue intentando encontrar financiación externa para este proyecto, principalmente a través del encaje de esta actuación en alguna línea de los fondos europeos Next Generation, aunque de llegar alguna ayuda se destinaría a la segunda fase.
La edil socialista ha señalado que entre las distintas alternativas que presentaba el proyecto de ejecución de esta infraestructura hidráulica básica, Aguas de Lucena se ha decantado por el inicio de las obras en los dos extremos del trazado, dejando para la segunda fase el tramo intermedio del recorrido de más de 22 kilómetros que separa el Nacimiento de Zambra de Lucena, siguiendo el trazado actual de la red.
Cabe recordar que en el pasado mes de agosto el alcalde, Juan Pérez, ya indicó que los servicios jurídicos municipales estaban trabajando en el pliego de cláusulas técnicas y administrativas de esta primera fase del proyecto, elaborado por la empresa de ingeniería GIS, por lo que todo hace pensar que, tan pronto como se obtenga el préstamo, se procederá a la licitación de la misma.
La primera fase cuenta con un plazo de ejecución de 9 meses, mientras que la segunda se llevaría a cabo en solo 7 meses.
La actual tubería, que será sustituida en su integridad, cuenta con más de 70 años de antigüedad y suma 22.000 metros de longitud, permitiendo que el agua llegue a los depósitos municipales por gravedad y sin necesidad de ningún tipo de impulso mecánico.
La mayor parte del presupuesto corresponde al capítulo de "conducción y valvulería", que supone más de un 60 por ciento del coste total, seguido del apartado de movimientos de tierras, que representa un 21 por ciento más. El presupuesto también incluye el bombeo del agua hasta el depósito de El Cahiz.
UN 50 POR CIENTO DE PÉRDIDAS
La decisión pretende optimizar el aprovechamiento del manantial de Zambra, que abastece a la ciudad desde mediados del siglo XX, cuya aportación porcentual al consumo diario de la ciudad había ido descendiendo paulatinamente en los últimos años como consecuencia de la sequía y de las importantes pérdidas de caudal que se producen en el transcurso del recorrido que realiza el agua hasta llegar a los depósitos municipales.
Hace unos años este acuífero llegó a aportar un 40 por ciento de los 9.000 metros cúbicos de agua que se consumen diariamente en Lucena, pero en la actualidad esa cantidad se ha reducido a una novena parte del total, unos 1.000 metros cúbicos diarios, estimándose que hasta la mitad del agua que sale de Zambra no llega a Lucena.
El alcalde, Juan Pérez, ha reiterado que la actuación será pagada mediante la concertación por Aguas de Lucena de un crédito a quince años que, presumiblemente, habrá de ser avalado por el Ayuntamiento y cuyos costes se repercutirán finalmente en los usuarios del servicio mediante el establecimiento de un canon, cuya imposición fue recientemente aprobada en pleno con los votos de todos los grupos, salvo el PP.
UNA OBRA 'RENTABLE'
Un informe realizado por la empresa municipal Aguas de Lucena indicaba que en 2020 llegaron hasta los depósitos de La Calzada 775.040 metros cúbicos de agua procedentes del Nacimiento de Zambra. Sin embargo, esta cantidad representa tan solo el 45 por ciento de los 1.704.015 metros cúbicos aflorados en la captación, lo que supone que 928.975 metros cúbicos se perdieron a lo largo de la conducción de 22 kilómetros que transcurre entre ambos puntos, situación que se espera subsanar con la creación de esta nueva red. La situación se ha visto agravada en estos dos últimos años por la sequía, obligando al Ayuntamiento a adquirir una mayor cantidad de agua del consorcio provincial Emproacsa.
Con la proyección de datos incluida en el estudio de Aguas de Lucena, la renovación de la conducción quedaría amortizada en un periodo inferior a 18 años, por lo que, teniendo en cuenta que la vida útil de la infraestructura ejecutada se cifra entre 30 y 50 años, la inversión no solo se considera viable, sino también rentable.
En el último trimestre de 2022 se puso en marcha el canon para el pago de estas obras, que según el estudio de la empresa supondrá para una familia media de cuatro miembros el pago de 1,83 euros al mes, cantidad que iría disminuyendo progresivamente hasta llegar a 1,51 euros al mes en el año 2036, cuando quedaría derogado.