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Un treinta y siete por ciento de los parados lucentinos llevan más de un año sin poder encontrar un puesto de trabajo. Son 2.044 de las 5.516 personas que a finales de octubre estaban en el desempleo, según los datos oficiales del SAE. La cifra es más dura si tenemos en cuenta que este colectivo ha crecido en los dos últimos años de forma espectacular, pasando del 13 al 37 por ciento nada más y nada menos que 24 puntos porcentuales lo que deja claras las dificultades del tejido productivo local para crear empleo y evidencia que cada vez es mayor el número de personas que agotan su prestación, disminuyendo los ingresos familiares y abocando a muchas familias a la pobreza.
La dramática estadística del paro en Lucena también deja otro dato importante, que ofrece un doble lectura. Se trata del casi 29% de personas sin empleo que llevan en esta situación entre uno y tres meses, un dato que, de una parte revela que la destrucción de puestos de trabajo aún no ha tocado fondo en nuestra ciudad, y de otra, la existencia de numerosos empleos temporales, de corta duración, generalmente viculados con tareas agrarias de temporada, que hacen que muchas de estas personas disfruten de pequeños contratos y entren y salgan con frecuencia del mercado laboral. En este sentido cabe señalar que durante el mes de octubre se registraron en Lucena 2.333 contratos de trabajo.
Completando esta parte del estudio, otras 739 personas llevan en el paro entre tres y seis meses, 669 entre seis y nueve meses y 477 entre nueve meses y un año.
POR EDADES
En cuanto a grupos de edad, es el de los parados entre 25 y 44 años el más numeroso, con 3.008 personas en paro, seguido por los mayores de 45 años, con 1.610 personas desempleadas y los jóvenes menores de 25 años, con 898 parados, lo que supone un 16,2 por ciento del total. De estos últimos, hay 683 jóvenes que nunca han disfrutado de un puesto de trabajo.
A estos desempleados "oficiales" se suman 767 trabajadores eventuales agrarios subsidiados y otros 227 demandantes insertos en algún tipo de formación para el empleo, lo que eleva a 6.510 el número de lucentinos y lucentinas que en estos momentos no tienen un trabajo normalizado.
INDUSTRIA Y SERVICIOS, LOS MÁS CASTIGADOS
La estadística demuestra, una vez más, que son la industria y el sector servicios los más perjudicados por la crisis económica, agrupando el setenta por ciento de los parados de la localidad, lo que se traduce en que sean las profesiones relacionadas con el sector servicios comercio y restauración sobre todo y con la industria manufacturera representada en Lucena sobre todo por el mueble las más demandadas.
En cuanto a su nivel de formación, llama la atención que casi un 69 por ciento de las personas sin empleo dispongan de estudios secundarios y otro 11% de estudios universitarios.
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