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El asunto de la apertura del puente de la carretera de Cabra sigue en el centro de la polémica política. A las declaraciones realizadas a este medio la pasada semana por el portavoz de IUCA, Miguel Villa, recriminando a la Junta de Andalucía su incapacidad para gestionar de forma rápida y eficaz la colocación del pretil de protección a ambos lados del puente, se sumaron el martes dos opiniones más, la del alcalde, Juan Pérez, amagando incluso con manifestarse ante esta infraestructura para exigir su apertura si no hay una solución en los próximos días y la del PP, haciendo públicas sus sospechas de que la razón última de que la empresa constructora no acate la colocación de la baranda estribe en el impago de las dos últimas certificaciones de obra por parte de la administración autonómica.
Sea como fuere, lo cierto es que vecinos y empresarios de la zona empiezan a perder la paciencia ante la evidencia de una obra totalmente terminada y cerrada al tránsito desde hace semanas. El regidor lucentino, Juan Pérez, califico la situación como "surrealista" en el pasado pleno municipal y volvió a poner de manifesto que, en las últimas semanas, los contactos con los distintos órganos de la administración andaluza implicados en esta obra han sido permanentes y que la propia consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, María Jesús Serrano, le indicó telefónicamente que tomaba personalmente la gestión de este tema y comprometió su resolución inmediata.
