La pedanía lucentina de Jauja tendrá que esperar para estrenar su playa fluvial hasta el próximo verano, aunque las instalaciones y nuevas zonas verdes aledañas podrán ser utilizadas con otros fines durante el resto del año. Así lo ha explicado esta mañana a LucenaHoy el concejal-pedáneo, Rafael Gómez, después de la visita que han realizado a las obras el alcalde, Juan Pérez, acompañado por el presidente del Grupo de Desarrollo Rural de la Subbética, José Luis Bergillos, acompañados por varios miembros de la corporación local y representantes de la empresa adjudicataria.
Gómez ha indicado que las obras de la primera fase concluirán la próxima semana, dentro de los plazos previstos. Los trabajos incluyen la creación del vaso de playa e instalación del sistema de depuración de agua, la plantación de una superficie de 2.000 metros cuadrados de césped, definición de zonas aterrazadas y creación de varias zonas de lámina de agua de carácter decorativo. El proyecto está siendo ejecutado por la empresa Construcciones Cabello, que recibió la adjudicación tras ofrecer una mejor oferta de 167.720 euros más IVA y ofreció una serie de mejoras, entre las que se incluyen la plantación de otros 1.000 metros cuadrados de césped, creación un campo de voley-playa, instalación de sombrillas, ampliación de zonas arboladas e iluminación, que se ejecutarán en las próximas semanas.
Rafael Gómez indicó que, "aunque será necesario llenar la zona inundable de la playa para comprobar el buen funcionamiento de las instalaciones, aún no será posible pisar las áreas de césped recién plantadas, por lo que, teniendo en cuenta las alturas del verano en las que nos encontramos, hemos desechado la idea de abrir las instalaciones este verano y se inaugurarán en otoño con otro tipo de actividades".
La intervención contempla una inversión de 223.000 euros, IVA incluido, que financia en un 66% el Grupo de Desarrollo de la Subbética y el Ayuntamiento con el 34% restante. La idea pretende convertir la ribera del río Genil a su paso por Jauja en una playa urbana y cuenta con el visto bueno de la Confederación. La actuación, planteada en dos fases, incluye en esta primera parte la creación de una balsa de agua que ocupa parte del antiguo campo de fútbol, permitiendo el baño, para lo que se bombeará agua desde el río con una renovación permanente de la misma. La balsa o zona de playa tendrá una capacidad aproximada de 460 m3 apoyada directamente sobre el suelo e impermeabilizada mediante la ejecución de una capa de hormigón proyectado, ya efectuada, con una profundidad máxima de 1,50 metros.
Además, se contempla la recuperación del acceso y parte de elementos originales perdidos de la Aceña árabe, la pasarela que recorre el interior del molino y el paso del agua del río a través de estas estructuras mediante un bombeo desde el cauce.
El consistorio ya ha conseguido que se pueda utilizar un tramo del Genil para la práctica de actividades acuáticas como el piragüismo o el rafting, como ya se viene haciendo en el mismo río entre las localidades de Benamejí y Palenciana.
En una segunda fase se crearán una serie de terrazas ajardinadas que albergarán distintas actividades lúdicas, aparcamientos y arbolado y un kiosko. También se prevé la creación de un albergue, que mejore la capacidad de alojamiento de la localidad, incluida en la Ruta del Tempranillo.