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MANUEL GONZÁLEZ
¿Qué ocurrió en el vestuario del Ciudad de Lucena? ¿Cómo motivó y espabiló Salva Serrano a sus hombres? Un paisaje negro se transformó en celeste. El filial del Lucena se marchó a los vestuarios con un 0-3 en contra y en inferioridad numérica por la expulsión, a causa de dos tarjetas amarillas, del lateral derecho Torralbo. Los quince minutos del asueto revolucionaron al Ciudad de Lucena y lo dotaron de autoestima. Los once jóvenes futbolistas regresaron al césped confiados en arrostrar a un Atlético Villanueva ducho y en franca ventaja.
¿Qué ocurrió en el vestuario del Ciudad de Lucena? ¿Cómo motivó y espabiló Salva Serrano a sus hombres? Un paisaje negro se transformó en celeste. El filial del Lucena se marchó a los vestuarios con un 0-3 en contra y en inferioridad numérica por la expulsión, a causa de dos tarjetas amarillas, del lateral derecho Torralbo. Los quince minutos del asueto revolucionaron al Ciudad de Lucena y lo dotaron de autoestima. Los once jóvenes futbolistas regresaron al césped confiados en arrostrar a un Atlético Villanueva ducho y en franca ventaja.
Las conversaciones en la grada durante el asueto versaban sobre el número de goles que anotaría el Atlético Villanueva en el segundo acto. Los de Bartolomé Árévalo, con futbolistas veteranos y con experiencia en categoría superior como Tato, Picón o Isidro, entre otros, manejaron a su antojo el primer tiempo y construyeron una distancia amplia.
El segundo equipo celeste se despojó de sus complejos en el capítulo segundo y se dispuso a jugar al fútbol. Elaboración en el centro del campo. Aperturas a ambas bandas. Desmarques. Envíos en diagonal. Actividad en la vanguardia.
El conjunto jarote, desde el primer minuto del partido, se lanzó hacia la portería de Sánchez. En el inicio, se presenciaron llegadas en ambas áreas. A medida que el partido crecía, el Atlético Villanueva se adueñó del esférico y, guiado por un inspirado Isidro, empezó a fabricar ocasiones de gol.
La propuesta tanto de Salva Serrano como de Bartolomé Arévalo era generar fútbol de toque. Este partido de Primera Andaluza en nada desmereció a otros de divisiones más lustrosas.
Pasado el primer cuarto de hora, Tato ejecutó una falta desde tres cuartos de cancha. El central de 42 años disparó directamente a puerta y Sánchez erró. El balón se hermanó con las redes y se adelantó el cuadro visitante.
Los rojillos aumentaron su dominio en el terreno de juego. Calidad en la delantera y cortes expeditivos en la defensa. Isidro marcó el segundo tanto, a la media hora, con un toque sutil y talentoso, casi sin ángulo, tras regatear a Sánchez.
Los tantos provocaron dispersión e imprecisión en un Ciudad de Lucena herido. La expulsión de Torralbo destrozó, momentáneamente a los locales, y la tragedia se cerró con el segundo de Isidro. El futbolista del Atlético Villanueva tomó para sí un rechace y definió con tranquilidad y eficacia.
El segundo acto estuvo presidido por una rotación de las características del primero. La rabia, la desesperación y la impotencia de Bartolomé Arévalo en el área técnica probaron la evolución del choque.
Salva Serrano realizó los cuatro cambios de futbolistas de campo antes del primer cuarto de hora de la reanudación. Cazu, Pato, Sergio y Jalao fueron los revulsivos del técnico prieguense.
El delantero Anto, un espigado, resolutivo e ingenioso ariete, lideró al Ciudad de Lucena. El 9 de los celestes aprovechó una asistencia de Ruano para inaugurar el casillero de los suyos. Materializó el tanto, por bajo, en un enfrentamiento vis a vis con Pedro.
En el siguiente gol se intercambiaron los papeles. Anto sirvió a Jalao y este disparó al segundo palo. Un complicado e inesperado tanto que impactó incluso al portero del Atlético Villanueva.
El Ciudad de Lucena metió la pierna en los balones divididos y cerró las filtraciones en defensa. El gol del empate lo ejecutó Cazu al remachar una jugada colectiva. Ruano, solo ante Pedro, tuvo la victoria en sus botas, pero lanzó al muñeco. Antes de la conclusión, el colegiado Hidalgo Torres expulsó a Javi Bermúdez y Koki, del Atlético Villanueva, y a Javi Barcos, del Ciudad de Lucena. La grada vibró con el Ciudad de Lucena. Hay materia prima en el filial celeste.
FICHA TÉCNICA:
3.-CIUDAD DE LUCENA: Sánchez, Torralbo, Lolo (Pato, min.59), Emilio, Pedro Hidalgo (Sergio min.52), Venzalá (Jalao, min.59), Cuadra, Javi Barcos, Ruano, Anto y Manu Pantoja (Cazu, min.52).
3.-ATLÉTICO VILLANUEVA: Pedro, Joki, Viñas, Tato, Alberto Arroyo, Alberto Fernández, Cepas (Márquez, min.54), Sergio Arroyo, Picón (Chiqui, min.60), Isidro (Lucas, min.66) y Javi Bermúdez.GOLES: 0-1, min.20: Tato; 0-2, min.30: Isidro; 0-3, min.40: Isidro; 1-3, min.60: Anto; 2-3, min.65: Jalao; 3-3, min.70: Cazu.ÁRBITRO: Hidalgo Torres, de Jaén. Expulsó, por doble amonestación a los locales Torralbo (min.30) y Javi Barcos (min.79) y, por el mismo motivo, a los visitantes Javi Bermúdez (min.70) y Joki (min.90).INCIDENCIAS: Partido perteneciente a la segunda jornada del grupo II de Primera Andaluza, disputado en el estadio Ciudad de Lucena en presencia de 300 espectadores aproximadamente.
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