Simultáneamente a la proliferación de apoyos y respaldos al Écija Balompié, un club al que lo asfixia un déficit corriente acumulado de 230.000 euros, el cuerpo técnico y la plantilla del Lucena perseveran con una honrada y ejemplarizante tenacidad que se estrella con la infinidad de obstáculos flotantes. Miki Ruiz, uno de los futbolistas más talentosos del vestuario y atinado portavoz, vocifera por enésima vez que resisten "sin apenas ayudas, ni agua para los partidos y entrenamientos; y mucho menos dinero para los desplazamientos". A los inconvenientes estructurales, se unen los apremiantes. El central Balta y el delantero Juan Roldán –este con destino a Italia- han decidido marcharse del equipo y la deuda de 2.900 contraída con la Federación Andaluza de Fútbol –derivada de fichas y recibos arbitrales- impide inscribir a nuevos jugadores. Además, este importe insatisfecho con el organismo regional ascenderá a más del doble si no es liquidado antes del 6 de diciembre.
En la tarde de este jueves, una semana después de la última cita, Rafael Carrillo –auténtico administrador cotidiano del conjunto azulón- se reúne en Córdoba con el presidente Eduardo Bouzón. Con Javier Martí Asensio, todavía director general, en paradero desconocido, el dirigente madrileño es el único componente real de la junta directiva. Según diversas fuentes, Bouzón habría negociado con la Seguridad Social un tercer aplazamiento del débito de más de 300.000 euros que bloquea a la entidad. La institución de cobertura pública podría exigir un aval bancario anual para acceder al fraccionamiento de un pasivo que impide, por ejemplo, percibir la subvención municipal aprobada para el ejercicio 2016- presupuestada en 13.000 euros-. Lo mismo ocurre con un embargo judicial ejecutado que ya ha sido notificado a las administraciones públicas. Por otro lado, ha trascendido que el máximo rector del club facilitaría un traspaso de poderes que redundara en la viabilidad de la entidad.
En estas circunstancias, el cuadro lucentinista prepara el encuentro del próximo sábado en el Antonio Barbadillo de Arcos de la Frontera, un envite correspondiente a la séptima jornada de la competición liguera y que precisamente fue aplazado a finales del mes de septiembre por la salida masiva de integrantes del vestuario y del propio adiestrador gaditano Juanlu Bernal.
Más adelante, el 8 de diciembre, el Lucena recibe al Cabecense, en un duelo de la fecha decimonovena que se ha fijado a las 12:00 horas. Los componentes de esta meritoria aventura continúan recabando dinero que les posibilite afrontar los gastos de desplazamiento y otros desembolsos básicos. Ahora sortean las camisetas de Amaya –Rayo Vallecano- y de Koke –Atlético de Madrid- y las botas del arquero del Villarreal Sergio Asenjo. El precio de las papeletas es de un euro por unidad y la rifa se efectuará en el descanso de la cita del próximo martes en el Ciudad de Lucena.