La interminable y enmarañada agonía del Lucena Club de Fútbol perdura en su goteo de episodios lastimosos. En el pasado mes de mayo, el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba denegó el concurso de acreedores a la entidad deportiva, decisión que implicaría la extinción de la personalidad jurídica. Y, como consecuencia lógica, la Federación Andaluza de Fútbol comunicaba el pasado 10 de junio que el club instituido en 1968 renuncia a la plaza que le correspondía en el grupo 1º de División de Honor para la temporada 2016-2017.
Las inabordables deudas –que también provocaron la retirada del campeonato liguero de Tercera División en diciembre del 2015- y la inexistencia de patrimonio se adivinan como los argumentos nucleares esgrimidos por el magistrado para inadmitir el concurso de acreedores solicitado por el Lucena CF.
Este procedimiento legal, antigua suspensión de pagos, permite a una sociedad diferir los pagos pendientes con los acreedores, la reducción de una parte de sus obligaciones pendientes y, en definitiva, se trata de un mecanismo para favorecer la viabilidad de empresas en dificultades.
El artículo 178.3 de la Ley Concursal faculta al juez para decretar la improcedencia del concurso por liquidación o insuficiencia de masa activa y acordar la extinción de la persona jurídica y la cancelación de su inscripción en registros públicos.
Por tanto, el auto emitido en el Juzgado de lo Mercantil de Córdoba, en el que se rechazaba nombrar a un administrador concursal, significa, en la práctica, la desaparición del Lucena CF.
Otro capítulo conectado a la descomposición integral del club se conocía en la mañana de este lunes. La Federación Andaluza de Fútbol enviaba un documento a la Olímpica Valverdeña -firmado hace tres días- comunicando la renuncia del Lucena CF a participar en el campeonato de División de Honor Sénior, escalón al que la escuadra celeste descendía administrativamente tras retirarse de Tercera al final de la primera vuelta del ejercicio 2015-2016.
El organismo autonómico se dirigía al equipo onubense por ser el beneficiario de la plaza vacante en el grupo 1ª de la nueva categoría, tras ser octavo en su sección de Primera Andaluza.
Según fuentes próximas a este asunto, la FAF ha remitido en estos días al menos dos cartas certificadas al domicilio del Lucena CF sin que las misivas hayan sido recibidas por representantes lucentinistas.