Montar unas buenas ventanas es imprescindible para poder frenar el calor en verano y el frío en invierno, como también para evitar que el ruido del exterior se cuele en tu casa. Son esenciales para disfrutar de unas condiciones idóneas para poder relajarte en tu hogar.
Ahora bien, para poder contar con una buena instalación, necesitas montar unos buenos cristales para tus ventanas. ¿Y cuáles escoger? Vamos a ver los tipos que hay y qué ofrecen para que puedas tomar una decisión.
Tipos de vidrio a elegir para tus ventanas
¿No sabes qué cristal elegir para las ventanas de casa? Sentimos decirte que hay una variedad de lo más abrumadora. A continuación, hemos recopilado los tipos más habituales dentro de las viviendas, al igual que algunos antiguos, para que veas las opciones que hay y valores.
También cabe mencionar que hay dos opciones en concreto, vidrios laminados y con cámaras, que pueden combinarse con el resto de opciones. En esos casos, la diferencia está en la estructura y colocación, no en su tratamiento y naturales
Cristal sencillo
Un tipo de cristal que ya no se usa siquiera. No es bueno en la aislación térmica, ni tampoco en la acústica. Por eso mismo, ya solo se ve en las casas que son demasiado antiguas. No se recomienda para nada en las ventanas de viviendas.
Cristal laminado
También conocido como vidrio de seguridad, el cristal laminado se forma uniendo dos láminas de vidrio con una capa de algún material translúcido (PVB o EVA). Son especialmente seguros ya que, gracias a esa capa intermedia, en caso de rotura, los fragmentos permanecen adheridos a esta. A veces se usan en grandes ventanales exteriores, por su resistencia y seguridad. Además, a veces se les trata, como veremos más adelante, para reducir la entrada de rayos de sol y su radiación.
Cristal con cámaras
Lo más habitual en cualquier vivienda actual son los vidrios con cámaras. En realidad, las ventanas que los usan tienen dos cristales, pero estos están separados por una capa de aire. De este modo, se consigue un mejor aislamiento térmico y acústico. Además, se puede optar por el triple acristalamiento, con dos capas de aire en lugar de una.
Cristal templado
Un vidrio centrado sobre todo en la seguridad, tratado química y térmicamente para aumentar su resistencia frente al normal. Es más resistente, obviamente, pero también, en caso de romperse, lo hace en trozos muy pequeños. De este modo, el peligro de corte es menor. Se recomienda en zonas donde hay mayor probabilidad de que haya un impacto, como por ejemplo en ventanales exteriores, puertas de terraza o mamparas de baño.
Cristal térmico
Los cristales térmicos, o vidrios de baja emisividad, son láminas a las que se le aplican, en una de sus caras, distintos metales con un porcentaje de plata. De este modo, reducen la radiación solar que entra en la vivienda, oscureciendo un poco la luz y reduciendo la entrada y salida de temperatura.
Cristal con control solar
Los cristales térmicos, al recibir un tratamiento especial, aumentan su capacidad para reducir la radiación UV, disminuyendo todavía más la entrada de calor en la vivienda.
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