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Las últimas semanas de abril, mayo y junio, son unas fechas en las que los lucentinos tienen sus agendas ocupadas con un gran número de actos con motivo del 450 aniversario de la llegada de María Santísima de Araceli a Lucena. Entre ellos se encuentran los de marcado carácter religioso, que permitirán a los fieles conseguir la indulgencia plenaria gracias a la concesión de la Santa Sede del Año Jubilar Aracelitano.
El pasado sábado, el obispo de Córdoba, Mons. Demetrio Fernández inauguraba este periodo en una Eucaristía en el Santuario de Aras. Durante este año jubilar los devotos que así lo deseen pueden ganarse la indulgencia plenaria con la confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Papa. También podrán aplicarla por las almas de los fieles que se encuentren en el Purgatorio. Es un ciclo de abundante gracia, de gran perdón de Dios y de misericordia y en el que con fe hemos de acercarnos a la Virgen de Araceli para pedirle al Señor todo lo que necesitemos, explicó el Obispo a LucenaHoy Cofrade.
En las palabras que el Pastor de nuestra diócesis concedió a niuestro periódico explicó que hay que ser atrevidos a la hora de pedirle a la Virgen de verdad gracias especiales en este año que no es solamente el recuerdo de los 450 años de su llegada a Lucena sino que es un ciclo en el que Ella misma nos dice a cada lucentino pedid y se os dará.
Mons. Demetrio Fernández ha tenido la ocasión de estar en una celebración semejante a la que ahora vive Lucena. Se trató del Año Santo de la Virgen de Trasobares en pleno Moncayo durante su anterior destino. Entre sus palabras, deseó que este año estuviera lleno de gracias para Lucena, todos los lucentinos y las personas que peregrinen hasta la Virgen de Araceli.
Mons. Demetrio Fernández, antes de ser nombrado Obispo de Córdoba fue de Tarazona, desde diciembre de 2004 hasta que el 2010 lo fue de Córdoba.
En la Conferencia Episcopal es presidente de la Junta Episcopal pro-doctorado de San Juan de Ávila, cuyas reliquias se encuentran en Montilla, y miembro de la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades de la misma entidad para el diálogo interreligioso.
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