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Apoteosis de documentación histórica sobre las advocaciones marianas y su conexión con las cofradías soleanas. El cronista oficial de la ciudad de Lucena, Luisfernando Palma Robles, pronunció este jueves la conferencia "La compasión de María Soledad y Quinta Angustia: entre la iconografía y la historia". Un numeroso público escuchó embelesado las interesantes aportaciones del ponente. La conclusión del riguroso investigador especificó que el origen de la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad de Lucena es incierto, pero la hermandad del Sábado Santo lucentino influyó en la creación de las corporaciones de Cabra, Priego e incluso Córdoba.
El comunicador local Miguel Ángel López Burgos presentó al orador. El acto aconteció como parte del programa de actos que la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad de Lucena ha promovido para conmemorar su 450 aniversario fundacional.
Luisfernando Palma Robles, quien añadió a su discurso 40 diapositivas ilustrativas, diferenció, en primer lugar, entre las advocaciones marianas netamente pasionistas y aquellas que no lo son.
Entre la vertiente dolorosa de la Semana Santa española, destacó las denominaciones de Amargura, Dolores, Quinta Angustia, Piedad, Virgen Afligida y Soledad. Igualmente, se refirió a la consideración mística de la unión en un solo Ser de la Pasión de Jesús y de la Virgen, como hilo conductor hacia la Quinta Angustia, en la que se observa el Descendimiento de la Cruz, en una definición canónica y ortodoxa.
En un recorrido por todo el panorama nacional, aludió a la Cofradía de la Quinta Angustia y Soledad de León, a la Cofradía de Nuestra Señora de la Quinta Angustia, Angustias y Soledad de la Virgen de los Desamparados de León de Valladolid, de las Angustias de Arcos de la Frontera y de Santiago de Compostela.
Por otro lado, habló del museo de escultura de Valladolid, en el que se identifica, en una obra al ángel con el alma humana y apuntó que en un cuadro de la Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Lucena la Quinta Angustia se mezcla con la Soledad, al estilo de Santa Teresa de Jesús.
"La Soledad es el anticipo de la Pascua", sostuvo y dijo que, a partir del siglo XIV, se empezó a usar la expresión Mariae Compassio, es decir, La Compasión de María. El citado farmacéutico y periodista lucentino se detuvo posteriormente en la advocación del Traspaso de María y en los Siete Dolores de la Virgen.
Durante su intervención, mantuvo que la Cofradía de la Soledad de Sevilla, instituida en el año 1556, es la más antigua de España, en lo concerniente a las soleanas, y resaltó la unión entre la Virgen sola y el Cristo Yacente. "Granada es la ciudad de la Soledad", sentenció. Finalmente, descartó que la Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad de Lucena, constituida en 1564, proceda de la hermandad de la Soledad de los Minimos o de la sevillana y subrayó la relevancia en la zona cordobesa de la hermandad del Sábado Santo lucentino.
MANUEL GONZÁLEZ
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