La fecha de la fundación de la hermandad de la Vera Cruz de Lucena se remonta a los años previos a 1554. Antonio Ruiz Granados, licenciado en Historia del Arte, lo recoge en un texto sustentado en las investigaciones del insigne lucentino Fernando Ramírez de Luque y otros investigadores como Luisfernando Palma Robles, José Luis Sánchez Arjona y Francisco López Salamanca. Desde este domingo 23 de octubre, la Mezquita-Catedral de Córdoba acoge una magna exposición, titulada Eterna es su misericordia, en la que se exponen documentos, reliquias del santo Lignum Crucis y patrimonio de distintas corporaciones de la Vera Cruz de la provincia. La comisión organizadora ha invitado a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Caído de Lucena como testigo de una institución religiosa que se extinguió a finales del siglo XX.
La cofradía arraigada en el templo de Santiago Apóstol aporta a la muestra la Cruz que porta Nuestro Padre Jesús Caído cada Jueves Santo –datada en 1719-, perteneciente originariamente a la hermandad de la Vera Cruz de Lucena, así como un documento hallado en el interior de la misma correspondiente al año 1824. Además, se han traslado a la capital el libro de cuentas que cubre el período 1650-1659, el más antiguo conservado, y los estatutos de la hermandad redactados en 1834.
La Archicofradía de la Santa Vera Cruz de Córdoba y las hermandades de la Vera Cruz de la diócesis, a petición del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, y del Cabildo Catedralicio, han organizado esta actividad para conmemorar la finalización del Año Jubilar de la Misericordia.
El fomento de la comunión, la difusión del patrimonio y la evangelización a través del arte son los propósitos de una iniciativa a la que acuden 17 hermandades de la Vera Cruz de la provincia cordobesa con sus imágenes cristíferas titulares. La Hermandad de Cabra enseña la Cruz de los Sacramentos y sus análogas de Belalcázar, Espejo, Priego de Córdoba y Córdoba contribuyen con la Santa Vera Cruz.
La exposición concluirá el 20 de noviembre, festividad de Cristo Rey. Un grupo de hermandades de la Vera Cruz presidirá cada jornada dominical, en la que se podrá alcanzar el jubileo. El domingo asignado a Lucena es el 6 de noviembre y la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de la Salud anima a los lucentinos a visitar la muestra y a asistir a la eucaristía que se oficiará en el mencionado día.