La Junta de Gobierno de la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli ha acordado dedicar la Capilla Sacramental del Santuario a la Madre Teresa de Calcuta que será proclamada santa el próximo 4 de septiembre.
Para ello, se están realizando los trámites oportunos para la instalación de un cuadro o escultura de la Madre Teresa de Calcuta que había sido declarada beata en octubre de 2003.
La proclamación de santa a la madre Teresa de Calcuta es una decisión del papa Francisco después de reconocer la curación supuestamente milagrosa de un brasileño que en 2008 se encontraba en fase terminal y cuya esposa encomendó a la fundadora de las Misionera de la Caridad Agnes Gonxha Bojaxhiu, nacida en la actual Macedonia en 1910 y fallecida en la Indica en 1997 tras dedicar su vida a "cuidar a los hambrientos, los desnudos, los que no tienen hogar, los lisiados, los ciegos, los leprosos, toda esa gente que se siente inútil, no amada, o desprotegida por la sociedad, gente que se ha convertido en una carga para la sociedad y que son rechazados por todos".
Esta actuación será un aliciente más para quienes visitan el Real Santuario de María Santísima de Araceli que el 22 de octubre de 2014, y en virtud de la afinidad de vínculo espiritual con la Basílica Papal de Santa María la Mayor de Roma, le fue otorgada las mismas Indulgencias Plenarias de las que goza la Basílica Papal Liberiana, que se conceden el 5 de agosto, fiesta titular de la Basílica Liberiana, el primer domingo de mayo, en todas las solemnidades de la Virgen Madre de Dios, una vez al año en el día que elija cada fiel y cuantas veces acudan en devota peregrinación colectiva. Las indulgencias han sido concedidas bajo la confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Sumo Pontífice.