Más allá del insufrible rosario de muertes y de los aspectos puramente sanitarios que ha traído aparejada, la pandemia de coronavirus va a dejar tras de sí unas enormes secuelas para las familias en forma de desempleo, pobreza y necesidad.
Lucena no es ajena a esta circunstancia. En estas últimas semanas el Comedor Social Virgen de Araceli ha cuatriplicado el número de usuarios que venía atendiendo antes de la llegada del coronavirus. Los apenas 30 comensales de hace unos meses son ya más de 120 en los últimos días y las cinco delegaciones de Cáritas ven con preocupación como se reducen las provisiones que dejó la campaña navideña del Centro de Orientación Familiar San Juan Pablo II, tras incrementar entre un cincuenta y un setenta por ciento el número de familias que atienden.
Esta situación ha sido el detonante de la "Caravana de Alimentos", que ayer recorrió las calle de nuestra ciudad, organizada por el grupo "Jóvenes Cristianos de Lucena", con sede en la Parroquia de Ntra. Sra. del Carmen, según explican Araceli Muñoz y Araceli Hidalgo, dos de las coordinadoras de esta actividad que ayer volvió a poner de manifiesto la solidaridad del pueblo de Lucena.
Desde las cinco de la tarde, varias furgonetas y vehículos dotados con megáfonos comenzaron a recorrer las calles de la ciudad, apelando a la colaboración de los ciudadanos aportando su donativo en forma de alimentos. Y la respuesta volvió a ser espectacular, recaudándose unos 35.000 kilos de productos, con más de 4.000 kilos de productos básicos como pastas, legumbres, arroz, azúcar; 4.000 litros de leche, más de 1.500 de aceite, unos 6.000 litros de productos de limpieza y una cantidad similar de higiene personal, además de una cantidad todavía no contabilizada de conservas o productos de alimentación y cuidado infantil, que constituyen el balance, aún provisional, de esta iniciativa.
RECOGIDA A DOMICILIO
En torno a sesenta voluntarios debidamente identificados participaron en la iniciativa, que se inicio con una misa en la parroquia del Carmen, y continuó con la recogida de las entregas a domicilio, colaborando en la descarga de los vehículos o en la desinfección y clasificación de los productos para su posterior entrega a los grupos locales de Cáritas y el Comedor Social, que en los próximos meses serán los encargados de hacer llegar este torrente de solidaridad a sus destinatarios finales, las familias de Lucena que los necesiten mientras todo vuelve a la normalidad, en una ciudad que comenzaba a reducir las listas del paro que dejó la crisis anterior y que vuelve a máximos históricos, como ocurre en todo el país.
Araceli Gómez, de "Jóvenes Cristianos de Lucena", señalaba que a la iniciativa se han sumado cientos de ciudadanos, cuyas donaciones fueron llegando durante toda la tarde hasta las instalaciones de la Caseta del Rocío, cedida para este fin por la hermandad. Además, entidades como la Peña Amigos de los Magos, Carrefour, Dcoop, el COF San Juan Pablo II y una larga lista de supermercados, empresas, farmacias, cofradías y colectivos locales pusieron su granito de arena para conseguir el éxito de esta convocatoria, con la que Lucena volvió a demostrar, una vez más, su vertiente más solidaria.
Os dejamos algunas fotos de esta actividad.
