Hoy ha quedado visto para sentencia en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Córdoba el juicio que se sigue contra el presunto autor de dos delitos continuados de agresión sexual, un delito de lesiones y un delito de maltrato habitual, supuestamente cometidos en Lucena por el acusado sobre sus dos hijos menores de edad y el hijo menor de su pareja y la madre de los niños.
La principal novedad al cierre de la vista es que la Fiscalía y la acusación ejercida por la Junta de Andalucía han convenido en rebajar sustancialmente –de 52 años a solo 44 meses– la petición de cárcel para la madre de los niños presuntamente violados y maltratados por el padre, al considerarla como "cómplice" y no como "cooperadora necesaria" en los delitos que se le imputan al hombre.
Según han explicado a Europa Press fuentes judiciales, la fiscal y el abogado de la Junta han cambiado sus calificaciones "ante las pruebas rotundas del proceso de violencia acreditado por la defensa de la mujer", de manera que "han entendido que la madre pasaba un miedo insuperable que condicionó su voluntad", de ahí que hayan solicitado una rebaja de la pena. Ambas acusaciones entienden que, según las mismas pruebas, "la madre en ningún momento cooperó con el acusado", por lo que sería meramente cómplice, al tener una posición de garante del bienestar de los niños y no denunciar los hechos, entendiendo que "tenía su capacidad de obrar condicionada por el proceso de violencia que sufría, lo que le impidió conocer la situación de riesgo en la que estaban los menores".
SE MANTIENE LA PETICIÓN DE 52 AÑOS PARA EL HOMBRE
Por contra, tanto la Fiscalía como la acusación particular que ejerce la Junta de Andalucía, han mantenido la petición de penas de 52 años de prisión para el procesado como presunto autor de los hechos.
En el último turno de palabra, la madre ha pedido a la Junta de Andalucía y a las familias que acojan a sus cinco hijos que "luchen por ellos y no pasen nunca el miedo y el proceso de violencia" que ella ha tenido que sufrir. Por su parte, el acusado ha mantenido que no ha cometido los hechos que se le imputan.
Como es sabido, los peritos que declararon este jueves en el juicio, expusieron que el hombre era "consciente" de lo que hacía, a la vez que han manifestado que las lesiones de los menores son compatibles con los hechos de los que se acusa al procesado y que las pruebas certifican que la mujer tenía "un miedo insuperable" ante "el proceso de violencia que sufría", según las fuentes.
El Ministerio Público considera que los hechos son constitutivos de dos delitos continuados de agresión sexual, por los que pide 44 años de cárcel y 50 años de orden de alejamiento; un delito de lesiones, por el que solicita cinco años de prisión y siete años de orden de alejamiento, y un delito de maltrato habitual, con tres años de cárcel y cuatro años de orden de alejamiento. Además, pide la pena de privación de la patria potestad respecto de los tres menores y distintas cantidades de indemnización de entre 12.000 y 1.800 euros.