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La crisis económica nos deja diariamente noticias que hablan de pobreza, de paro y de necesidades, pero también hermosas iniciativas de solidaridad y trabajo por quienes lo están pasando peor en esta situación. Un claro ejemplo de ello tenía ayer como protagonista a una pizzería lucentina.
Más de 200 pizzas salieron en la noche de ayer del horno de la pizzería artesana Pericote. Más de 1.600 raciones de pizza y varios centenares de refrescos o cervezas distribuidos en apenas unas horas gracias al sentido solidario de este establecimiento lucentino, que lleva más de treinta años en activo, veintiocho de ellos realizando una de las mejores pizzas de la ciudad. Los colaboradores debían pagar dos euros por ración y refresco o bien el importe de la pizza completa y el teléfono para hacer encargos no dejó de sonar en toda la noche.
Su gerente, Felipe López, nos contaba esta tarde que el éxito de la iniciativa desbordó todas las previsiones "y hasta las existencias de masa e ingredientes para seguir haciendo pizzas", y que todo el personal de su establecimiento, al que se sumaron voluntarios de Cáritas de Santiago entidad beneficiaria de esta iniciativa gastronómica y solidaria acabaron la noche "cansados pero satisfechos" por haber logrado recaudar una importante cantidad de dinero que será entregada a la ONG para atender las necesidades de las familias que acuden a la misma para recoger alimentos.
"Queremos mostrar nuestro agradecimiento a todas las empresas colaboradoras y a todos los lucentinos y lucentinas que ayer apostaron por esta idea y cenaron con nuestra pizza, porque gracias a ellos, podrán comer también muchas familias necesitadas", señalaba hoy Felipe López.
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