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El número de personas desempleadas se ha duplicado en Lucena en los tres últimos años. Con el incremento del número de personas desempleadas ha crecido también el de familias que precisan de ayuda para salir adelante. De ello dan fe las cada vez más numerosas colas que se forman ante las distintas parroquias para recibir ayuda a través de Cáritas. Primero eran sólo inmigrantes, primeras víctimas de la crisis, hoy son tanto familias extranjeras como nacionales las que buscan cada quince días la bolsa de alimentos.
Fuentes de Cáritas aseguran que en los dos últimos años se ha triplicado el número de personas que reciben ayuda de esta institución. a pesar de que se han endurecido los requisitos, se calcula que entre cuatro y cinco mil personas reciben estas ayudas en la actualidad y el número de españoles ya es mayoritario.
Así las cosas las necesidades de esta ong también se multiplican y los productos que reciben del Banco de Alimentos son insuficientes. En esa línea de apoyo a Cáritas se enmarca la campaña que por cuarto año consecutivo organiza el Centro de Orientación Familiar Juan Pablo II, que acaba de anunciar su ofrenda de alimentos a las familias necesitadas, que tendrá su culminación el próximo jueves, día 15, con un telemaratón organizado en colaboración con Videoluc Televisión. Según el subdirector del COF, Juan Ángel Huertas la iniciativa pretende cubrir las necesidades más básicas de las cada vez más numerosas familias castigadas por la crisis. El pasado año, la iniciativa logró reunir más de 37.000 euros y más de 70.000 kilos de alimentos no perecederos de primera necesidad.
Actualmente Cáritas de Lucena se nutre de excedentes de la Unión Europea gestionados por el Banco de Alimentos que efectúa cuatro repartos anuales de alimentos a las organizaciones dedicadas a tareas solidarias.
En Lucena realizan estos repartos de comida cuatro Cáritas Parroquiales, que atienden a distintos grupos de población. Santiago atiende a los marroquíes y San Mateo a los sudamericanos, mientras que búlgaros y rumanos corresponden a Santo Domingo. En algunos casos el númeo de familias atendidas se ha triplicado en tan sólo dos años.
Según Araceli Morales y Teresa Pérez, representantes de Cáritas de Santo Domingo y Santiago respectivamente, el número de familias lucentinas atendidas por este colectivo no para de incrementarse "y cada quince días surgen 6 y 7 familias más". Para muchas de estas familias comer, pagar servicios básicos como el agua o la luz o hacer frente al alquiler se convierte cada mes en un reto imposible. Además, cada vez es mayor el número de familias lucentinas que han pasado de una situación económica desahogada a la pobreza total, familias hasta hace poco acomodadas, que accedieron alcrédito fácil para adquirir coche y vivienda o acometieron importantesinversiones empresariales y que hoy, tras perder negocios o empleosviven casi en secreto de la ayuda humanitaria que proporciona Cáritas.
Pedro Arroyo, coordinador de la campaña, indicó que pretenden llegar a todos los centros escolares de la ciudad, así como a empresas e instituciones de todo tipo, incluida la agrupación de Cofradías.
La lista de alimentos y productos prioritarios que se piden al pueblo de Lucena es la siguiente: aceite?, legumbres (lentejas, garbanzos, habichuelas etc..)?, leche?, productos infantiles: tanto de alimentación, como cereales, potitos, leche maternizada o en polvo y pañales, galletas?, tomate frito?, conservas de todas clases, zumos?, chocolates para niños?, bollería?, productos envasados que no necesiten refrigeración (salchichón, queso) y cuya fecha de caducidad no sea próxima, dulces de Navidad, productos de higiene (champú, gel, jabón) y de limpieza (detergentes, etc..).
El día 15 Lucena tiene la oportunidad de volver a ser solidaria. Colabora con esta causa.
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