El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciaba este viernes que las mascarillas dejarán de ser obligatorias en los espacios al aire libre a partir del sábado 26 de junio.
"Este será el último fin de semana con mascarillas en los espacios en los exteriores", celebraba el presidente, que añadía que se podrá volver a "disfrutar de una vida en la calle sin mascarillas" y agradecía la disciplina de toda la ciudadanía durante la pandemia, el trabajo de los sanitarios y los servicios esenciales.
El jefe del Ejecutivo subrayó que el Gobierno aprobará esta decisión porque se están cumpliendo "punto por punto y escrupulosamente" todos los objetivos que se habían marcado sobre la crisis sanitaria.
"España avanza, avanzamos, vamos dejando atrás lo que llamamos nueva normalidad el pasado verano y nos vamos acercando a la normalidad a secas", indicó Sánchez.
El anuncio de Sánchez llega en un momento en el que Andalucía es la comunidad autónoma con una mayor incidencia de España, si bien en los dos últimos día se ha iniciado un leve descenso de la tasa, que hoy se sitúa en 176,29 puntos por cada cien mil habitantes en los últimos 14 días frente a los 179 puntos del viernes, muy lejos de comunidades como Baleares, Galicia, Valencia o Murcia, en torno a 40 puntos. De hecho, las declaraciones del presidente del Gobierno llegaban solo una horas después de que el consejero de Salud y Familias de la Junta, Jesús Aguirre, intentase cerrar el debate de las últimas semanas sobre la posibilidad de eliminar de manera inminente la obligatoriedad del uso de la mascarilla, asegurando que en Andalucía aún tendría que utilizarse "hasta finales de julio o mediados de agosto" o hasta alcanzarse "como mínimo el 75% de inmunidad total de nuestra población", es decir, hasta que esa proporción de habitantes no tengan la pauta completa de vacunación.
Ayer el consejero de Presidencia del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, aseguraba que en Andalucía "adoptaremos la decisión que se adopte a nivel nacional" sobre el uso de las mascarillas, pero criticaba que es una medida que "no se ha consensuado con las comunidades autónomas".
Cuestionado por la capacidad de decisión que tiene la Junta al respecto, Bendodo indicó que la propuesta de Sánchez es para final de mes, por lo que "vamos a evaluar la evolución de la incidencia a final de mes y en caso de que pueda estar alta todavía en Andalucía, recomendaríamos el mantenimiento del uso de las mascarillas, va a depender de la evolución de la pandemia en estas próximas semanas".
Bendodo ha asegurado que "la vacunación es lo importante", apuntando que Andalucía está siendo "el mejor ejemplo de España" en este sentido "y vamos a seguir trabajando", al tiempo que hacía una "llamada a la prudencia: no significa esto que la pandemia ha terminado, estamos en los últimos metros".