La Fiscalía defendió ayer que "hay pruebas suficientes" contra el hombre al que acusa de un delito de homicidio, tras supuestamente matar a otro varón por una deuda, cuando iba acompañado de su mujer y su hijo de cuatro años de edad, en la calle Arévalo.
Según señala la agencia de noticias EuropaPress, que sigue el juicio con jurado iniciado ayer y que continúa este miércoles en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Córdoba, la fiscal del caso, que pide para él una pena de un total de 15 años de prisión, ha subrayado en su exposición inicial que el procesado "es el responsable de la muerte", después de que la víctima "le debía dinero", unos 2.000 euros, y "se enzarzaron" tras una discusión en la que le dio "una puñalada en el corazón".
En este sentido, ha detallado que los hechos ocurrieron a la luz del día y en un sitio "lleno" de gente y considera que no se ha producido un asesinato con alevosía, como en este caso califican los abogados de la acusación, que describen al presunto homicida como una persona "violenta y agresiva" que acabó con la vida del otro hombre "por una mísera deuda de 2.000 euros", resaltan.
Además, consideran que actuó contra la víctima "sin posibilidad de defenderse" ésta, "por la espalda", a lo que añaden que "eligió el momento", porque el fallecido "no sabía lo que se le venía encima", al tiempo que apuntan meses antes el presunto autor amenazó al varón.
Por su parte, la defensa ha lamentado que "se ha hecho creer que es él" quien ha cometido los hechos, cuando "hay sangre de una tercera persona" en la zona, según el letrado, quien ha señalado que el suceso puede ser calificado como "homicidio imprudente", aludiendo en este caso a distintas atenuantes, como "legítima defensa, un trastorno o un arrebato", así como "las dilaciones indebidas" en el proceso.
Igualmente, ha comentado que ambos eran "amigos" y en el momento de los hechos la víctima "reaccionó agresivamente" cuando el presunto homicida le pidió el dinero que le debía, a lo que añade que el fallecido "utilizó una navaja", según el relato de la defensa.
UN ARMA BLANCA
En concreto, el Ministerio Público detalla en su calificación que sobre las 14,10 horas del 8 de marzo de 2011, el procesado se encontró con el varón, acompañado por su mujer y su hijo, y supuestamente entabló una discusión con él "al reclamarle una cantidad de dinero que le debía".
De este modo, "reaccionando agresivamente y con ánimo de acabar con su vida", arremetió contra el hombre y tras caer encima de éste, valiéndose de un instrumento punzante, concretamente un arma blanca, "se lo clavó en el costado izquierdo del torso, a la altura del corazón, causándole la muerte debido a un 'shock' hemorrágico secundario a rotura cardiaca", según indica la fiscal.
Como consecuencia de ello, la mujer de la víctima reclama lo que a su derecho convenga en su nombre y en el de su hijo menor de edad, apunta el Ministerio Público en su escrito de calificación.