4.100 alumnos de enseñanza infantil y primaria se han incorporado hoy a los once colegios de nuestra ciudad, incluidas las pedanías de Jauja y Las Navas, en una jornada que nos dejaba las típicas escenas de los llantos de los más pequeños en el momento de separarse de sus madres y padres para entrar por vez primera a las aulas, pero mayoritariamente la alegría de las escenas del reencuentro del alumnado tras el periodo estival y la satisfacción de los padres, para los que el inicio del curso supone un cambio drástico en la vida cotidiana.
La jornada de vuelta a las aulas se ha desarrollado "con total normalidad y ausencia de incidentes reseñables" según la edil de Educación, Lourdes Parra, en un curso que marca el final de las principales restricciones impuestas por el COVID 19, a pesar de que será necesario seguir manteniendo la prudencia, y la aplicación de la nueva ley de Educación (la LOMLOE), que se incorporará, de momento, en los cursos impares: primero, tercero y quinto de primaria. En el resto de niveles su implantación empezará en el curso 2023-2024.
En distintos horarios y de forma escalonada, durante toda la mañana han ido entrando a las clases los escolares. Parra ha señalado que en Lucena se incorporan este año en Infantil de tres años un total de 386 alumnos, solo 5 menos que el año pasado a pesar de la reducción importante que se ha producido a nivel regional.
En cuanto al profesorado, la edil lucentina ha destacado que se han incorporado la práctica totalidad de las plantillas, incluido en profesorado de apoyo COVID, que se mantiene en los centros de mayor tamaño, lo que permitirá el desdoble de algunas clases de los niveles superiores en centros como el Al-Yussana, Antonio Machado y El Prado. El único dato negativo es la pérdida de una línea en el colegio El Valle, tras desatender la Consejería las peticiones formuladas durante el verano por el AMPA del centro y el conjunto de la comunidad educativa local. No obstante, la Junta sí ha mantenido –al menos por este curso– el profesor de apoyo con el que contaba el centro, que será fundamental para poder atender adecuadamente al elevado número de alumnos con necesidades especiales que se incorporan.
Por otra parte, todo estaba preparado en los colegios en los que se han llevado a cabo diferentes intervenciones y trabajos de pintura y mantenimiento durante el verano. No obstante, la delegación municipal de Educación ha programado para las próximas semanas algunas actuaciones "de última hora" como la ampliación del comedor escolar del CEIP El Carmen, que recibirá más alumnos de los previstos, lo que hace necesaria la eliminación de una pared que se ejecutará en los próximos días; o la pintura con un producto antideslizante del pavimento de las pistas deportivas de los colegios El Valle y Virgen de Araceli, como ya se hizo el pasado año en el San José de Calasanz.
Señalar por último que al menos tres colegios de Infantil y Primaria tendrán que compaginar parte del curso lectivo con obras en sus dependencias. Se trata de los centros Virgen del Valle, El Prado y Ntra. Sra. del Carmen, donde esta prevista la realización de obras de mejora enmarcadas en el programa de bioclimatización y energías renovables del Plan de Infraestructuras Educativas de la Consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, en el que también colabora la Diputación de Córdoba en algunos casos. Los trabajos incluyen tanto la instalación de climatización adiabática como el cambio de ventanas en las aulas y, según Lourdes Parra, se iniciarán "entre los meses de febrero y marzo", estando prevista esta incidencia por los claustros de los distintos centros afectados.
El resto de los estudiantes de enseñanzas no universitarias iniciarán las clases el 15 de septiembre, a excepción del alumnado de enseñanzas artísticas superiores que se incorporarán el próximo 20 de este mes.