En torno a las siete de la tarde ha concluido sin acuerdo la reunión que han mantenido esta tarde el alcalde, Aurelio Fernández, los ediles de Obras y Comercio, Javier Pineda y Francisco Barbancho, y el jefe de la policía local, José Pino, con una decena de vendedores, en representación del colectivo de comerciantes del mercadillo municipal.
El portavoz de la plataforma, Jesús Mendoza, ha indicado a LucenaHoy que los vendedores consideran "insuficientes" los avances producidos durante la reunión y "mantienen su negativa a montar sus puestos en el emplazamiento en forma de "P" invertida, aprobado en pleno, "por lo que mañana tampoco habrá mercadillo en Lucena".
Mendoza ha señalado que el alcalde, Aurelio Fernández, se ha mostrado dispuesto a estudiar una alternativa al trazado actual, que permita disponer los puestos en forma de "U", pero ha exigido que, entre tanto, el mercadillo siguiese funcionando en la ubicación y formato propuestos por el Ayuntamiento, a lo que los vendedores han expresado nuevamente su tajante negativa, al entender que dicha disposición perjudica a una gran parte de los vendedores.
El colectivo de vendedores decidirá en las próximas horas, tras comunicar la situación al conjunto de vendedores, si organiza algún acto de protesta durante este miércoles.
EL PSOE APROBARÁ LA MOCIÓN DE CIUDADANOS
Cabe señalar que el pleno ordinario convocado para este miércoles tiene previsto debatir una moción de Ciudadanos en la que se solicita al equipo de gobierno volver a la ubicación anterior.
Esta mañana el concejal del PSOE, Alberto Lora, ha adelantado la decisión de su grupo municipal de apoyar la moción, aunque aseguraba que Ciudadanos "llega tarde" y recriminaba a la formación naranja su abstención en el pleno en el que se votó el trazado que rechazan los vendedores. Lora ha recordado que su grupo "ha sido el único" que ha apoyado en todo momento las pretensiones de los comerciantes "tras consultar con la práctica totalidad de los mismos y tomar nota de su rechazo".
El edil socialista ha calificado como "cabezonería" la actitud del equipo de gobierno "que no escucha a los ciudadanos" pese a considerar que "lo que piden no es nada extraordinario".