Un grupo de agentes de la policía local volvieron a llevar en la noche de ayer sus reivindicaciones al pleno del ayuntamiento de Lucena bajo el ya conocido eslogan de "Juan Pérez no cumple", situación que, unido a la pregunta del PP sobre este tema –aplaudida por los manifestantes– obligó al regidor lucentino, Juan Pérez, a explicar su versión de unos hechos que, desde hace meses, separan a una parte de la plantilla de la policía local del equipo de gobierno.
Así, Juan Pérez aseguró que "el 80% de las peticiones realizadas por la policía respecto a servicios, horarios, horas extras o mejora de las infraestructuras, ya se han cumplido". Pérez recordó que el problema se genera cuando las medidas puestas en marcha por el gobierno central obligan a incrementar el horario laboral de 35 a 37,5 horas semanales a todo el personal municipal, incluida la policía local, que ya prestaba y cobraba como horas extras esas dos horas y media. Ante esa situación, siempre según la versión de Pérez, la mejor opción para que la policía recuperase las remuneraciones perdidas, era la modificación puntual de la Valoración de Puestos de Trabajo (VPT), a la que se habrían dedicado "infinidad de reuniones, entre 40 y 50 durante el último año", tanto con los sindicatos como con una empresa externa contratada a tal efecto. Sin embargo la VPT tuvo alegaciones y la normativa vigente impedía su entrada en vigor. En este punto, el alcalde indicó que será la próxima semana cuando se resuelvan las alegaciones presentadas.
Respecto a nuevo reglamento de segunda actividad, Juan Pérez manifestó que "el borrador me fue entregado hace dos meses" y sobre un posible incremento de la productividad a la policía local, el regidor indicó que "mostramos nuestro acuerdo, siempre y cuando todos los sindicatos municipales –y no exclusivamente los de la policía local– diesen su visto bueno", algo que no ocurrió, al considerar algunos sindicatos que otorgar mejoras en la productividad a la policía iba en contra de los intereses del resto de empleados municipales.
Por último Juan Pérez señaló que "ante la evidencia de que la nueva VPT no se puede aplicar, puesto que lo impide la ley, se va a plantear dar un nuevo criterio a la productividad y aplicarla de forma proporcional a la valoración que arroje la VPT, hasta que esta última pueda aplicarse".
El alcalde aseguró para terminar que "estoy actuando como creo que debo hacerlo, en defensa de los intereses del ayuntamiento y de la ciudadanía".
Las últimas palabras de Juan Pérez no fueron oídas por los agentes, que se marcharon antes de que concluyese su exposición. Sin embargo fueron contestadas por el concejal del PP, Julián Ranchal, que culpó a Pérez de "prometer lo que no puede cumplir, como ya ocurrió también con la entrega de las viviendas de AVRA en El Zarpazo".
Pérez contestó indicando que "yo entiendo la situación de estos policías, aunque no todos están en la misma situación, y algunos no han visto reducido su salario de forma sustancial, existiendo casos en los que la rebaja es de solo 300 euros al año, como consecuencia de unos cambios en la normativa de los que no tenemos culpa".
RESPUESTA DEL SPPME-A
En la mañana de hoy y como respuesta a las palabras de Pérez en el pleno de ayer, el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España con sede en Andalucía (SPPME-A), ha hecho público un comunicado de prensa eque reproducimos a continuación en su integridad:
"El SPPME-A, como representante del 80% de la plantilla y de la treintena de policías asistentes al mismo, y como consecuencia de las opiniones vertidas por el Alcalde, el Sr. Pérez, durante el desarrollo de éste, que causaron la indignación y el estupor de los agentes allípresentes y que originóel abandono inmediato del acto plenario de todos estos, desea expresar:
En primer lugar seguimos manteniendo nuestro lema "JUAN PEREZ NO CUMPLE", ya que ha faltado a su palabra, puesto que en una reunión mantenida con toda la plantilla, el primer edil manifestósu intención de regularizar la precaria situación laboral de los agentes locales mediante una valoración de puestos de trabajo, valoración ésta, que tras casi tres años no se ha llevado a cabo. El Sr. Alcalde, a pregunta de un representante del Partido Popular, expresaba en el pleno que no ha sido por culpa suya sino por imposibilidades legales que le han impedido ejecutarla. Pese al descontento del colectivo por esta respuesta, ya que valoraciones de igual calibre se han realizado en ciudades como Córdoba y Sevilla sin impedimento alguno, los grupos sindicales han seguido manteniendo reuniones con el equipo de gobierno para plantear soluciones alternativas, pero absolutamente todas han sido prorrogadas en el tiempo para posteriormente darle carpetazo. Como ejemplo de esto es el último reglamento de productividad presentado por este sindicato, que el primer edil afirmóser posible su aplicación si contaba con la mayoría de los grupos y representantes de los trabajadores, y que posteriormente se retractaba añadiendo que necesitaba el acuerdo por unanimidad de todos los representantes y no de la mayoría como anteriormente había dicho, unanimidad, que dicho sea de paso, no se exige nunca para llegar a acuerdos.
Es por esto que seguimos diciendo "JUAN PEREZ NO CUMPLE", ya que somos el único colectivo que ha sufrido una merma sustancial en sus retribuciones, frente a otros funcionarios de este ayuntamiento que no sólo no han sufrido recortes, sino a los que Juan Pérez les ha aumentado su sueldo, desoyendo incluso los informes del Secretario y Vicesecretario municipal, que advertían de su ilegalidad, o el caso de los sobresueldos a personal de la extinta SERVIMAN, para los que el Sr. Pérez no exige unanimidad para llegar a acuerdo, todo lo contrario, deciden pagar estos sobresueldos incluso votando en contra todos los sindicatos. Es más que evidente que el alcalde, Juan Pérez, siente más afinidad por unos funcionarios que por otros en este Ayuntamiento.
Una vez sabido esto, cuando el Sr. Pérez, manifestóen el salón de plenos que había agentes que apenas habían rebajado su sueldo respecto a años anteriores, y que si había pérdida ésta sería de unos 400 euros al año, el grupo de Policías allípresentes en bloque, tuvo que abandonar el acto sumidos en la más absoluta repulsa e indignados ante tan magna mentira, lo que induce a pensar que, o no tiene ni idea de lo que hablaba, o estaba engañando a la opinión pública. Tan peligroso es lo primero como lo último, porque ha tenido cuatro años para conocer nuestros problemas y, en cualquier caso, un alcalde no puede permitirse mentir a la ciudadanía.
A modo de síntesis y como consecuencia de los últimos hechos acontecidos, debemos de cambiar nuestro eslogan de "JUAN PEREZ NO CUMPLE" a "JUAN PEREZ NO CUMPLE Y ADEMAS MIENTE"
