Carlos Villa, representante de Izquierda Unida en el consejo rector del Patronato Deportivo Municipal, ofreció este jueves el análisis de su grupo sobre la gestión del equipo de Gobierno en lo referente al Festival Chanclas. A modo de prólogo, aclaró que su intención no se centraría en "evaluar a la empresa organizadora" sino en "poner de manifiesto la ineficacia y el cúmulo de irresponsabilidades" del alcalde y sus delegados municipales.
En su discurso, dos días después de la sesión extraordinaria del máximo órgano del PDM, propuesta por Izquierda Unida, dijo que para resumir lo acontecido en torno al Chanclas, cuyo coste para el Ayuntamiento ha sido de 8.000 euros -4.000 de subvención directa y otros 4.000 en publicidad-, usaría el titular "peor, imposible"
Para comenzar, señalaba que ninguna fuerza política, a excepción del PSOE, "está de acuerdo" con la evaluación de los daños que han redactado dos entidades externas al PDM y que calculan en unos 900 euros los desperfectos en la hierba del estadio Ciudad de Lucena, recinto donde se celebró el festival los días 19 y 20 de agosto. "La cantidad nos parece irrisoria, pensamos que solo han valorado individualmente los centímetros de césped estropeados y han estimado que arreglarlos cada uno cuesta tanto dinero". Asimismo, criticaba que no existe un estudio de cómo se encontraba el terreno antes de la actividad musical y después de la misma.
De igual forma, tildó de "muy deficiente" la organización efectuada por el equipo de Gobierno. Como aspecto ilustrativo, apuntó que en el consejo rector extraordinario "no quedó claro quién era el responsable de dirigir las instrucciones, trasladar las órdenes y vigilar el montaje, el desmontaje y la limpieza del campo de fútbol". En relación a esto último, puntualizó que los representantes del Chanclas asumieron la obligación de devolver la instalación municipal en el mismo estado que la recibieron, tanto en el interior como en el exterior y, sin embargo, la zona externa hubieron de recogerla empleados de la Administración local, con el gasto que conlleva para las arcas públicas.
Con todo lo expuesto, Carlos Villa sentenció que "alguien tendría que asumir responsabilidades" por unos hechos que definió como "caóticos". El concejal de Izquierda Unida le reprochó intensamente al equipo local la "alteración unilateral" del seguro locativo, reducido el mismo día del inicio de los conciertos de 450.000 euros a 150.000 euros. "El primer teniente de alcalde, José Cantizani, ha explicado que ante el número de entradas vendidas, de haber suspendido la actividad, podría haberse producido un altercado público, tras consultar con el jefe de la Policía Local". Estas declaraciones de quien ejercía de regidor el 19 de agosto, se ofrecieron este martes en el consejo rector, para justificar que se aceptara ese descenso en el importe de la cobertura. Para Villa, "en el decreto que se hace a última hora, se comete un error: se deja en un tercio el uso del césped, pero el afoso se deja en el mismo número de personas, otra irregularidad".
Por otro lado, Villa indicó que, desde su visión, el equipo de gobierno asistió al consejo rector como si se tratara "de un mero trámite, haciendo caso omiso a todo lo que allí se decía". Y, para IU, la conclusión de los gobernantes es "dar gracias a Dios que de aquí no ha pasado nada".
En cuanto a las citaciones que se cursaron para que acudieran a pronunciarse en el consejo extraordinario, Carlos Villa se quejó de que el PDM no convocara al jefe de equipo, responsable habitual del mantenimiento, apertura y cierre del estadio, como así se pidió desde la oposición, y en su lugar se llamara a un peón, que tampoco se personó en el salón de plenos.
Finalmente, terminó subrayando que se corrieron "graves riesgos para la infraestructura del estadio y para la integridad de las personas" y, con vistas a un futuro, "si el Chanclas Festival 2017 no se celebra en Lucena, no será por culpa de los miembros del consejo rector u oposición, sino por la mala organización del equipo de gobierno".