El grupo municipal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Lucena ha efectuado un requerimiento a la Delegación de Servicios Sociales para que refuerce una serie de acciones, orientadas a paliar los efectos de la ola de frío en aquellas familias o personas que se encuentren en una realidad de vulnerabilidad económica y no puedan asumir el pago del suministro eléctrico, con el consiguiente riesgo de supresión de este servicio. Entre otras medidas, se ha solicitado que trate de impedir la presencia de ciudadanos o transeúntes sin ningún techo donde resguardarse y actuar de forma preventiva ante los cortes ordenados por las empresas eléctricas.
Desde Izquierda Unida se indica que Teresa Alonso, concejal delegada de Servicios Sociales, "ha respondido afirmativamente" a los siguientes compromisos planteados por la formación que lidera en el Consistorio Miguel Villa: alertar a la Policía Local para que procure que ningún ciudadano o transeúnte se encuentre abandonados en la calle, sin un techo del que refugiarse del frío; alertar y movilizar a los Servicios Sociales para que tramiten con urgencia las ayudas necesarias, y palien el sufrimiento de los ciudadanos en esta situación; y ponerse en contacto con las entidades suministradoras de energía para pedirles que no se produzca ningún corte de suministro en hogares, sin que previamente se alerte a los Servicios Sociales para recibir la ayuda que proceda.
En la nota de prensa remitida a los medios de comunicación, Izquierda Unida señala que la ola de frío polar anunciada en nuestro país "tendrá especial incidencia en nuestra ciudad durante los días de esta semana, donde se espera que la temperatura descienda por debajo de los cero grados". Estas circunstancias, "nos genera una honda preocupación" por las consecuencias "que pueda tener en los ciudadanos cuyos recursos económicos les impidan atender sus necesidades básicas y mantener la temperatura de sus hogares".
Finalmente, Izquierda Unida traslada un llamamiento "a toda la ciudadanía" para que, en caso de conozcan a familias o personas que atraviesen o bien una pobreza energética o riesgo de exclusión, que lo participen al Ayuntamiento para que se preste la asistencia social "a la que tienen derecho".