Transcurrida más de una semana desde el cese de las restricciones nocturnas de agua, la consejera delegada de Aguas de Lucena, María de la O Redondo, ha explicado hoy que, hasta el momento, la medida se ha traducido en la necesidad de incrementar entre una y dos horas diarias el bombeo de agua procedente del Pantano de Iznájar. De esta manera, la mayor compra de agua a Emproacsa está paliando el gasto adicional que supone prescindir de los cortes durante la noche y los depósitos se están manteniendo sin problemas en torno a los 6 metros de altura, un 75 por ciento de su capacidad. Cabe señalar que en este momento se están comprando entre 11 y 12 horas de bombeo, lejos de las 18 del pasado verano.
Respecto a la posibilidad de mantener esta situación, Redondo ha remitido al Consejo de Administración de Aguas de Lucena, inicialmente anunciado para esta semana y que, finalmente, se celebrará en la que viene. No obstante, la responsable de Aguas de Lucena ha señalado que todo va a depender de la cantidad de agua que llegue en los próximos meses desde el acuífero del Nacimiento de Zambra, que actualmente aporta a los depósitos municipales entre 2.400 y 2.500 metros cúbicos de agua, casi un treinta por ciento del gasto diario, cantidad que contrasta con los apenas 300 o 400 metros cúbicos que aportaba durante el periodo estival.
"Si sigue sin llover esa aportación disminuirá y en función de ello tendríamos que comprar más agua a Emproacsa" ha señalado Redondo, que también anunciaba que se han subsanado averías importantes "en medio del campo" y se han detectado "algunos fraudes importantes" vinculados a riegos irregulares, lo que estaría suponiendo ya un ahorro de entre 800 o 900 metros cúbicos diarios.
Así las cosas, habrá que esperar al Consejo de Administración de Aguas de Lucena para saber si vuelven las restricciones o se mantiene el suministro nocturno o si se establecen medidas complementarias respecto a riegos o llenado de piscinas.