El examen de Lengua Castellana y Literatura ha abierto esta mañana la realización de la Prueba de Acceso a la Universidad (PEvAU), la Selectividad de toda la vida, que, como no podía ser de otra forma en un año atípico, se realiza con una fórmula modificada debido a la pandemia y un ambiente y protocolo diferentes, que extrema las medidas de seguridad para el alumnado que se somete a las pruebas después de tres meses sin volver a las clases y que, por ejemplo, hace obligatorio el uso de mascarilla, obliga a mantener la distancia de dos metros de seguridad, incluye vigilantes jurados para hacer cumplir las normas y no permite ni el acceso de los padres al centro ni la posibilidad de que los medios de comunicación puedan tomar imágenes de las pruebas.
Desde primeras horas de la mañana se ha visto mucho ambiente en las inmediaciones de los dos institutos lucentinos en los que se han desdoblado las pruebas, el Marqués de Comares, para los alumnos de este centro y los del IES Sierra de Aras, y el Juan de Aréjula, para quienes han cursado estudios en el mismo.
Según ha explicado la concejala de Educación del Ayuntamiento de Lucena, Lourdes Parra, las pruebas se han iniciado "con total normalidad y estricto cumplimiento de las medidas de seguridad".
En el IES Marqués de Comares se han examinado 206 alumnos y en el Juan de Aréjula lo han hecho otros 74, todos ellos en aulas dotadas de aire acondicionado y en grupos reducidos, de hasta 10 alumnos por clase en algunos casos.
Los alumnos que hoy inician la PEVAU han tenido que hacer la tercera evaluación de forma virtual y los exámenes online. Junto al examen de Lengua hoy se celebrarán las pruebas de Historia de España y Lengua Extranjera. En la jornada del miércoles seguirán con otras asignaturas de modalidad de la fase de acceso mientras que el jueves harán las pruebas de asignaturas específicas de la fase de admisión la que sirve para subir nota hasta 14 puntos.