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El concejal de Urbanismo y responsable de Servimán, Miguel Villa, se ha mostrado satisfecho del nivel de colaboración que están mostrando las cofradías lucentinas en cuanto al seguimiento de la ordenanza municipal que prohibe el vertido de cera sobre la vía pública. Villa ha señalado a LucenaHoy que durante las semanas previas a la celebración de la Semana Santa ya se convocó una primera reunión entre representantes del ayuntamiento, policía local, Servimán y la Agrupación de Cofradías para estudiar distintos temas relacionados con la Semana Santa, entre ellos el de la cera. Según explicó Villa "en esa reunión ya se expuso al presidente de la Agrupación de Cofradías, Antonio Díaz, la obligación de las hermandades de evitar en la medida de lo posible el vertido de cera sobre la vía pública y la necesidad de utilizar recogeceras, comprometiéndose éste a trasladar esta petición a las cofradías".
Asimismo, en la reunión de la Junta de Gobierno Local celebrada el pasado día 22 se determinó, como en años anteriores, remitir a las cofradías un comunicado reiterándoles la necesidad de utilizar estos dispositivos para minimizar la caída de cera sobre las calles. Lo cierto es que hasta ahora todas los hermanos de vela y las mantillas de las distintas cofradías han utilizado los recogeceras.
Villa indicó que, de cara a minimizar más aún el impacto de la cera sobre el asfalto o el granito instalado en la Plaza Nueva o el entono del Castillo, el ayuntamiento procedió a aplicar un producto especial sobre las calles del recorrido oficial de las cofradías del Domingo de Ramos. Según el concejal de Urbanismo "este producto se diluye con agua y evita que los aceites de la cera se incrusten en la piedra, facilitando su limpieza posterior". Sin embargo, el hecho de que el producto sea resbaladizo en condiciones de humedad y la pérdida de efectividad en caso de lluvia ha desaconsejado su utilización, dadas las previsiones meteorológicas, "e incluso la necesidad de retirarlo en algunas zonas como la Cuesta del Reloj para evitar cualquier tipo de problema".
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Por otra parte, tanto el martes como ayer, durante la procesión del Silencio, Servimán instaló una plataforma metálica que se ha realizado para eliminar el fuerte desnivel con el que se corona la cuesta del Castillo tras las obras realizadas, desnivel que a juicio de la Agrupación de Cofradías podía suponer un peligro para los santeros.
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