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"Memorial de Samuel de Lucena": exégesis de una novela abortada. El Salón de los Espejos mezcló en la noche de este viernes literatura y flamenco. El escritor sevillano Fernando Azancot Fuentes presentó una obra "rara". La editorial que la divulgó quebró justo después de publicar la primera edición del libro. La creación "genuina" narra la vida de un judeoconverso del siglo XVI relacionado con Lucena.
Mario Flores, presidente del Círculo Lucentino, calificó de "muy especial" la velada y transmitió su "firme decisión e interés" por exhibir el libro en Lucena. "Es una novela magnífica, he tenido el gusto y el placer enorme de leerla, incluye una fuerza enorme y una narrativa poderosa". Finalmente, Mario Flores se mostró convencido de que el autor sevillano encontrará una nueva casa editorial y existirá "segurísimo" en un futuro".
El comunicador lucentino Juan Parejo introdujo a Fernando Azancot e incluso "versificó una soleá". Igualmente, Curro Lucena cantó una petenera y lo acompañó a la guitarra Ángel Mata. Juan Pérez, alcalde de Lucena, también concurrió al acto. Azancot nació en Sevilla en el año 1935 y es licenciado en Ciencias Económicas y Económicas por la Universidad Complutense de Madrid,
La vinculación de Fernando Azancot con Lucena se inició en el año 1972. Según él mismo comentó, en una entrevista realizada por este medio, "mi relación con Lucena haa discurrido por la senda de un amor ausente, salpicado de discretas presencias, y por el ámbito de la literatura, y si se quiere, con más rigor, por el de la retórica, ya que el año 1972 fui mantenedor del I Velón Flamenco de Lucena, un certamen para jóvenes en el que resultó vencedor quien se convertiría con los años en una de las grandes figuras del cante, Calixto Sánchez Marín. Años más tarde, en 1982, me designaron para pronunciar el Pregón de la Semana Santa lucentina y santera, y finalmente, al cabo del tiempo, el año 2001, tuve el inmenso honor de ser nombrado pregonero de la Fiestas Aracelitanas, una experiencia para mí inolvidable"
En el Salón de los Espejos del Círculo Lucentino, Fernando Azancot sostuvo que "pocas ciudades conozco que merezcan la excelencia como Lucena". El escritor depositó en la biblioteca de la institución el último ejemplar de "Memorial de Samuel de Lucena".
Samuel de Lucena, como tantos otros sefardíes, es un judeoconverso, que disimula su verdadera fe mosaica, bajo el entonces incipiente barroco ropaje del cristianismo, católico, romano y tridentino, al que finalmente se convierte cuando descubre en Jesús de Nazaret el verdadero Mesías, según expuso Azancot.
Desde su huida de Lucena, a causa de una matanza de judíos, hasta su llegada a Sevilla, donde finalmente muere, le acontecen los más variados sucesos, gozosos unos, trágicos y dolorosos otros. Fernando Azancot clasificó su obra como una "novela genuina" en la que prima "la fantasía", aunque "indudablemente transcurren hechos en un marco histórico determinado".
MANUEL GONZÁLEZ
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