La feria 'aracelitana' puede haber sido la última en el actual recinto ferial, al menos tal y como lo hemos conocido durante los últimos más de treinta años. El equipo de gobierno ya cuenta con un plano de distribución del nuevo recinto ferial, que presentará mañana jueves a la asociación de feriantes para conocer sus impresiones sobre la nueva configuración del mismo.
La edil de Fiestas, Mar Morales, confirmaba ayer a este periódico que desde su delegación se trabaja ya para que la Feria del Valle se celebre en su integridad en el nuevo recinto, una vez concluidas las obras que actualmente se están llevando a cabo y que supondrán la urbanización de una importante bolsa de nuevos suelos, que permitirán que tanto la calle del infierno como las casetas puedan instalarse en esta zona.
La principal duda en estos momentos es si la Caseta Municipal también se trasladará al nuevo recinto: "Estamos barajando la posibilidad de que por el momento se ubique en una gran carpa, estamos estudiando presupuestos pero el coste parece a priori muy elevado, ya que a la propia carpa habría que sumarle aspectos como iluminación o baños, por lo que este año quizá tenga que permanecer en su actual ubicación".
Para el resto de casetas tradicionales la solución pasa por utilizar como puerta de acceso principal las traseras, orientadas al nuevo recinto, con lo que quedarían plenamente integradas en la 'nueva' feria. Todas salvo una, la de la Peña San Cristóbal, más retranqueada, para la que no valdría esta alternativa de uso.
También podría haber novedades en agosto con la Feria de San Francisco, que podría volver a su barrio muchos años después de su traslado al recinto ferial. "Nuestra propuesta es que vuelva a su barrio. Para la mayoría de los feriantes no es rentable instalarse en el recinto y esa fue la principal razón para llevarla hasta allí, y, por otra parte, los vecinos han venido pidiendo su recuperación en las calles del barrio en los últimos años", sañala Mar Morales, que dispondrá de solo unos meses para resolver todas estas incógnitas, solo unas semanas más de lo que durarán las obras.