Las voces de siete niños, desde once países diferentes, nos zarandean para remover conciencias, mostrándonos, en primera persona, la crueldad de la guerra, las calamidades de un mar que se idealiza como utopía de la esperanza, la explotación desalmada de las mafias y, a menudo, el rechazo en esa tierra que le prometieron. Esta es la trama –y el drama- de Nacido en Siria –continuación de Nacido en Gaza (2014)- documental de 85 minutos nominado a los Premios Goya 2017 y que se ha programado en Lucena, este jueves 2 de febrero, desde las 20:30 horas, en Multicines Artesiete.
El periodista, escritor y documentalista italo-argentino Hernán Zin es el director de Nacido en Siria, cuya producción ha correspondido a La Claqueta, una compañía fundada por Olmo Figueredo, un joven sevillano oriundo –por la rama paterna- de Lucena.
Hernán Zin expone que su intención es "que la película ayude a que todos reflexionemos sobre la parte de responsabilidad que nos toca en esta historia" y desea que su obra contribuya a "construir puentes, en estos tiempos en que tantos abogan por construir muros".
El documental rinde tributo a "las más de 3.500 personas que han muerto tratando de llegar a Europa desde el comienzo de la guerra y Siria –la mitad de ellos niños- y a los tratan de reconstruir sus vidas lejos de su país de origen".
A través de la plataforma http://www.youfeelm.com/titulo/nacido-en-siria-artesiete-lucena-cordoba se pueden adquirir las entradas para la sesión anunciada en Lucena. "La aceptación ha sido muy buena", apunta Olmo Figueredo puesto que el porcentaje conseguido de demanda supera el 250% y si normalmente se precisan de 25 días para lograr el mínimo contemplado, en la localidad se cubrieron esas plazas de referencia en diez jornadas.
Olmo Figueredo comentaba a LucenaHoy que "no estamos haciendo estrenos convencionales, con los documentales es difícil", aunque augura que "si ganamos este sábado el Goya –hay otros tres candidatos-, cambiaría la situación". Sobre Nacido en Siria, se muestra convencido de que "a la gente le va a sorprender la capacidad que tienen los niños para expresar sus sentimientos". Han pretendido eliminar "cualquier suspicacia política" y, para ello, hablan "niños de entre 8 y 15 años que viven situaciones muy dramáticas y complicadas". En síntesis, "buscamos que se genere debate y que cada uno reflexione sobre su papel como ciudadano y acerca de este problema que vivimos y que nos afecta a todos".